El parking provisional del Hospital Donostia entrará en funcionamiento el lunes

El aparcamiento provisional se ha habilitado sobre una superficie de 7.500 m2 en unos terrenos orientados hacia el club de golf Basozabal que ha habido que nivelar ya que se encontraban en desnivel y cubiertos de vegetación. Los operarios se afanan estos últimos días en dejar a punto esta infraestructura para su entrada en funcionamiento el lunes. Contará con 234 plazas de aparcamiento, una cifra que no cubrirá las más de 500 que ofrecía el actual parking en superficie, por lo que se mantendrán las colas de coches en horas punta que se vienen repitiendo durante los últimos meses.

El parking provisional del Hospital Donostia empezó a construirse en marzo del año pasado y el proyecto de obra preveía que los trabajos se alargaran hasta julio, pero pronto se vio que los plazos se iban a dilatar bastante más. Hasta el punto de que Osakidetza tuvo que variar su idea inicial de empezar las obras del edificio de protonterapia una vez que el nuevo aparcamiento estuviera operativo. En octubre, el Departamento de Salud comenzó de manera oficial estos trabajos con el cierre de una parte del actual aparcamiento en superficie que deshabilitó un centenar de plazas de estacionamiento. En diciembre el avance de las obras terminó por 'comerse' casi la mitad del parking.

Para paliar en parte la pérdida de plazas de aparcamiento, el Servicio Vasco de Salud habilitó para el público en general el parking de 250 plazas que antes era de uso exclusivo para trabajadores del Hospital Donostia –el más próximo a este centro sanitario–, aunque ello no ha evitado que se formen colas en las horas puntas.

Paralelamente, el Departamento de Salud y el Ayuntamiento de San Sebastián llegaron a un acuerdo para que el consistorio cediera de forma gratuita a Osakidetza una parcela de aparcamiento junto al complejo de Illunbe que desde el pasado 28 de octubre está dando servicio a los sanitarios y demás trabajadores del ente durante el tiempo que duren las obras de ampliación de la ciudad sanitaria donostiarra. El convenio entre ambas partes permite que los profesionales puedan aparcar sus vehículos en el parking en superficie habilitado junto a Illunbe que, en los meses de verano, se suele utilizar como aparcamiento disuasorio con un autobús lanzadera al Centro.

En este caso, los trabajadores de Osakidetza que estacionan allí sus coches pueden utilizar el autobús que el Servicio Vasco de Salud programa diariamente para facilitar el acceso de sus trabajadores desde distintos puntos del territorio. Desde ese día, estos buses vienen realizando una parada adicional cerca de Illunbe –donde también paran las líneas 17, 28 y 31 de Dbus– para acercar al hospital a quienes aparcan en esta zona.

La medida, en cambio, ha suscitado cierta polémica entre los propios profesionales del Hospital Donostia, que denuncian tener que acudir con varias horas de antelación a sus puestos de trabajo tras haber perdido el derecho a utilizar el aparcamiento del hospital. En las últimas semanas se han concentrado a las puertas del centro sanitario como medida de protesta. También los usuarios y familiares han mostrado sus quejas de forma reiterada en este periódico.

Los problemas de estacionamiento en la ciudad sanitaria donostiarra se prolongarán al menos tres años, durante el tiempo de construcción del edificio de protonterapia y consultas externas, ya que entre las dos nuevas construcciones contarán con un aparcamiento subterráneo de unas 1.000 plazas que debería abarcar la demanda de aparcamiento.