El pescador Imanol Ansa con el ejemplar de atún patudo, recién marcado. Azti
Pesca

La recaptura de un atún patudo evidencia la fidelidad de la especie al Golfo de Bizkaia

El ejemplar capturado fue marcado por el pescador Imanol Ansa en julio 2023 y recapturado casi un año después por el barco pesquero San Fermín Berria a unos 185 kilómetros al oeste de su punto de marcaje

Miércoles, 6 de noviembre 2024, 10:57

La reciente recaptura de un atún patudo en el Golfo de Bizkaia ha aportado datos clave sobre el comportamiento de esta especie, poco estudiada en la región y de gran valor gastronómico. El descubrimiento resalta la importancia de la colaboración entre pescadores deportivos y centros de investigación para promover la conservación y la gestión sostenible de las pesquerías. La captura muestra también la evidencia científica de la fidelidad del atún patudo al Golfo de Bizkaia

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El ejemplar fue marcado por el pescador deportivo Imanol Ansa a bordo del Julenimanol, de Hondarribia durante una jornada de pesca recreativa organizada por la asociación Arraindenok en colaboración con AZTI, el 30 de julio de 2023. Casi un año después, el 30 de junio de 2024, el mismo pez fue recapturado por el barco pesquero San Fermín Berria, a unas 26 millas de la costa de Suances (Cantabria) y 185 kilómetros al oeste de su primer punto de marcaje. Durante este periodo, creció 9 cm y su peso aumentó 4 kg, alcanzando los 10.5 kg.

Este hallazgo proporciona nueva evidencia de la «fidelidad» del patudo a estas aguas, sugiriendo que el patudo, al igual que el bonito del norte y el atún rojo, podría regresar anualmente o residir de forma continua en la zona.

Colaboración entre pesca recreativa y ciencia

Este descubrimiento ha sido posible gracias al programa de «marcaje y suelta» liderado por AZTI, con el apoyo del Gobierno Vasco. Esta iniciativa permite que pescadores deportivos contribuyan a la investigación científica mediante el uso de marcas tipo espagueti, una tecnología sencilla que facilita el seguimiento del crecimiento y los movimientos de los túnidos. Estos datos resultan esenciales para entender mejor sus patrones migratorios.

«Cada recaptura nos proporciona una ventana única sobre los patrones migratorios, crecimiento y hábitos alimenticios de especies menos comunes como el patudo. Estos datos permiten mejorar la gestión y conservación de los túnidos, favoreciendo la sostenibilidad de las pesquerías», explica Iñigo Onandia, investigador de AZTI y experto en marcaje de túnidos.

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