Después de escuchar infinidad de mitos sobre cómo cuidar la piel durante todo el año, y a pesar de las muchas campañas de concienciación dirigidas a disipar creencias erróneas, hoy damos un paso al frente a nivel formativo de la mano de Itziar Beitia.
Publicidad
- Parece una obviedad a estas alturas de la película, pero la apuesta por la protección solar durante todo el año es indispensable.
- Sí. El sol está ahí siempre, esté nublado o soleado. Este emite diferentes tipo de radiaciones, las UVA y UVB, responsables de las quemaduras, las alergias y las lesiones más graves como los melanomas u otros tipos de cáncer de piel. Estas radiaciones son más intensas durante las jornadas más soleadas de la temporada estival, aunque el sol también emite otras como la luz visible y la infrarroja que llegan a la tierra todos los días del año. Éstas son las responsables directas de la aparición de manchas, la propagación de arrugas y la pérdida de firmeza.
- ¿Qué mitos existen alrededor de las cremas solares?
- Muchos y muy variados: desde la necesidad de preparar la piel exponiéndonos sin protección para que se vaya curtiendo, a «habilitarla» recibiendo sesiones de cabinas UV para que la tez coja cierto color amarronado o la creencia de que el numerito de los envases indica los minutos que podemos exponernos al sol sin quemarnos. Todos estos bulos no hacen más que poner en jaque nuestra salud. Una cuestión que mucha gente desconoce es que la piel tiene memoria y que todo el daño que ha sufrido a lo largo de la vida se va acumulando, haciendo que con el tiempo aparezcan manchas, arrugas, incluso melanomas.
- ¿Cómo saber si estamos aplicando la cantidad adecuada de producto?
- Muy sencillo: para no errar, debemos coger nuestros dedos índices y corazón, y aplicar sobre ellos la cantidad suficiente para cubrir el largo de los dos. Acto seguido, tenemos que aplicar dicha cantidad por todo el rostro y repetir el procedimiento cada dos horas para estar totalmente protegidos.
- ¿Cuáles son las manchas y los lunares más peligrosos?
- El control es esencial para prevenir los melanomas. Para ello, en nuestro caso concreto, tenemos una metodología muy fácil de recordar a la que se le denomina 'ABCDE'. Estas siglas hacen referencia a asimetrías, bordes, color, dimensión y evolución. Y aunque es necesario visitar al dermatólogo, este método de comprobación nos sirve para que nosotros los controlemos y podamos valorar si es recomendable adelantar la visita anual al especialista.
Publicidad
- ¿Cómo prevenir antes que lamentar?
- Prevención diaria y control anual. Es la clave del éxito. Haciendo un seguimiento periódico, además de estar más bellos por fuera, también lo estaremos por dentro.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.