5 hoteles de Euskadi para una experiencia de lujo en primavera

Para hacer un 'stop' en nuestra ajetreada rutina, parar y coger aire; dejar el estrés de la ciudad atrás, y conectar con la naturaleza por unas horas en un escenario que invita al descanso, estos cinco hoteles reúnen todo lo necesario para afrontar con fuerzas renovadas esta recién estrenada primavera.

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Situado en el monte Ulía se encuentra el hotel boutique Mendi Argia, una casona del siglo XX que cuenta con unas vistas inmejorables de la ciudad, ubicada en un marco de postal. En sus habitaciones cuidadosamente decoradas conviven a la perfección tradición y diseño, un lugar idílico en el que alejarte del ritmo frenético de la ciudad y parar a coger aire.

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Woody Allen o Elizabeth Taylor son algunos de los personajes que se han alojado en las habitaciones del emblemático Hotel María Cristina, el cinco estrellas por antonomasia de la capital guipuzcoana. Situado frente al edificio del Kursal y a unos pocos pasos de la Parte Vieja, es el lugar ideal para vivir una experiencia de lujo en la Bella Easo.

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Naforrala, una antiguo caserío del siglo XIX, cuenta con ocho habitaciones decoradas con notas rústicas y nórdicas, con la misión de que el huésped se sienta como en casa. Es uno de los nuevos «hoteles capricho» del País Vasco con vistas a un paisaje de ensueño y situado a tan solo 10km de Bermeo. Se merece un hueco en tu agenda esta primavera.

Entre viñedos de Txakoli, se encuentra escondido el Hotel Iturregui. Con una fachada de grandes ventanales y vistas al faro de Getaria, es el espacio de paz y tranquilidad que estabas buscando para conectar con la naturaleza durante esta primavera. Un edificio integrado a la perfección en el espacio pintoresco que le rodea y, que además, cuenta con una piscina construida sobre las ruinas del antiguo caserío que ocupaba.

En un enclave inmejorable frente al océano Atlántico y a tan solo 10 minutos en coche del centro de la ciudad, el Hotel Akelarre, además de ofrecer a sus huéspedes una estancia de lujo, cobija la delicada cocina de Pedro Subijiana con tres estrella Michelín. Una parada obligatoria para todo amante del mundo de la gastronomía y una experiencia de lujo para todos los sentidos donde respirar aire puro frente a la inmensidad del océano.