Triunfo del vaquero y la camisa en galas y eventos

De hecho, París ha vuelto a reivindicar su papel como la gran capital de la moda mundial con la llegada de prescriptoras de todos los rincones del mundo. Y la Haute Couture Fashion Week ha servido para vislumbrar y adelantar muchos de los looks y tendencias que llevaremos en los próximos meses. Atentas:

El triunfo de los pantalones vaqueros. Elevó el rosa fucsia a su máximo esplendor, convirtió la corbata en un accesorio imprescindible en los looks femeninos más 'cool' y ha catapultado dos básicos de fondo de armario a piezas de alta costura. La camisa blanca y el vaquero han llegado para quedarse en todas sus versiones. No es una deducción, es toda una declaración de intenciones por parte de Valentino. Sobre todo si tenemos en cuenta el arranque de su 'fashion show' con la gran Kaia Gerber ataviada con unos 'jeans boyfriend', una camisa blanca masculina, unos zapatos (mules) metalizados con gran lazada y pendientes XXL.

Y no ha sido la única firma. La casa Balenciaga también ha puesto contra las cuerdas todos los estereotipos elevando prendas básicas y de continuidad a la categoría de la alta costura. ¿Quién no se ha enamorado de los 'jeans' de Demna Gvasalia combinados con un 'maxi' abrigo de leopardo y salones con sello de la marca?

Joyas XXL. Las propuestas de los directores creativos han demostrado que las piezas de gran tamaño sustituirán en breve a la corriente minimalista que ha imperado desde hace varias temporadas. Los collares en el caso de Schiaparelli y los pendientes XXL, según Pierpaolo Picchioli, llegarán para quedarse.

Todo al blanco. Es el color que más hemos visto durante estos días, sobre todo entre los asistentes a los desfiles de Dior y Fendi. Lo cierto es que durante este próximo otoño-invierno es una tonalidad que la disfrutaremos en trajes, vestidos, faldas, capas, abrigos, complementos... ¿Será el blanco el nuevo negro? Tiempo al tiempo. Por el momento inspiraros en los looks de Eiza González y Álex Rivière-Sieber. Espectaculares.

Vestidos con capucha. Fue precisamente Saint Laurent hace dos temporadas, y Schiaparelli y Stephane Rolland este año las casas que han incluido este elemento entre sus propuestas. Aunque se trata de una tendencia complicada de defender, parece que seguirá triunfando tanto de día como de noche.

Escote Bardot y palabra de honor. Las 'trendsetters' más avispadas llevan más de un año apostando por el escote con los hombros al aire. Y estos días ha quedado patente que su reinado continuará, con permiso del palabra de honor, que ha conquistado a muchas de las invitadas a través de vestidos de caja cuadrada.

Bolsos de tamaño 'mini'. Y si pensábamos que estas piezas habían pasado a la historia, nada más lejos de la realidad. Las calles de la capital gala han demostrado que cuanto más pequeño, mejor. Ahora bien, minúsculo sí -hasta ahí de acuerdo-, pero práctico ante todo.