Borrar
Marijo en el interior de su tienda Tejidos Ami. ARIZMENDI
«Viene gente de todas las partes a verme, es algo que a veces no me creo»

Errenteria

«Viene gente de todas las partes a verme, es algo que a veces no me creo»

Tras nueve años de mucho trabajo Marijo Sotelo ha convertido Tejidos Ami en un punto de referencia de las telas gracias, entre otras, a las redes sociales

Martin Sansinenea

Errenteria

Sábado, 23 de noviembre 2024

Hacer de una afición una forma de ganarse la vida es quizás una de las cosas más reconfortantes que puede haber. No obstante, para conseguirlo, el esfuerzo y el sacrificio son imprescindibles, y más cuando se deja un trabajo estable, para lanzarse a abrir un negocio.

Tejidos Ami es el proyecto de vida de Marijose, una errenteriarra de toda la vida que ama todo lo relacionado con la confección y las telas. Una grandísima profesional que además trata a todo el que entra por esa puerta como a un amigo. Su amabilidad, trato y cariño son típicos de esos negocios de toda la vida que tanto se echan en falta en estos días.

No obstante, aunque sea un pequeño local de Errenteria, su clientela proviene de todas las partes de la península, ya que Marijo, con la ayuda de su sobrina, cuenta con un perfil de Instagram con más de 12.000 seguidores. Un salto a las tecnologías que le ha permitido tener clientes «que en la vida hubiera pensado tener».

Mucho cariño

«Esta tienda es un proyecto de vida para mí, lo doy todo por este negocio, la gente lo nota»

–¿Cómo comenzó en el mundo de las telas?

–A mí siempre me ha gustado coser. Somos familia numerosa y yo en carnavales les hacía arreglos a mis hermanos. Todo ello cuando tenía nueve añitos. Era algo que me encantaba, les hacía vestidos a las muñecas y poco a poco fui mejorando hasta entrar en academias de corte y confección.

–¿Y cómo se puso usted al mando de esta tienda?

–Como te he comentado era clienta de este negocio cuando lo llevaba Mari Carmen, quien lo abrió en el año 83. Yo trabajaba en un supermercado, pero tenía la sensación de que podía hacer otra cosa. Por ello, hace nueve años, dejé todo lo que tenía y cogí la tienda, ya que Mari Carmen se iba a jubilar. Ella ya me había comentado alguna vez que esto tenía que seguirlo yo, y así ha sido.

–Ha sido usted un relevo generacional.

–Algo así. Sin ser de su familia pero he cogido la tienda que ella comenzó. Es cierto que ahora hacemos algunas cosas diferentes, pero creo que la esencia de una tienda de toda la vida se sigue conservando a la perfección.

–¿Cómo fueron los comienzos al mando de la tienda hace nueve años?

–Arrancar con algo nunca es fácil. Aunque yo sabía que esto saldría adelante porque el tema de las telas es algo que me apasiona. No obstante, cuando empiezas con una tienda física te das cuenta de que hay muchas más cosas que solo vender.

–En cuanto al sector de las telas, ¿desde su punto de vista en qué situación se encuentra?

–Es un sector que está subiendo. La afición a la costura está en auge. Y eso es algo que sobre todo se ha notado desde la pandemia. Sí que es cierto que tener una tienda física es un reto, pero diría que el sector poco a poco está atrayendo a más personas. Por otra parte, Errenteria es un lugar con mucha tradición de comercio.

–Es un trabajo al que se le dedican muchas horas a la semana

–Claro. Al fin y al cabo aquí se hacen pedidos de telas, se venden, se cuida el local y también se suben vídeos a Instagram. Todo ello es trabajo, y aunque sea algo que te encanta tienes que tener tiempo para ti, para poder desconectar.

–Ha dicho que sube contenido a las redes sociales, ¿cómo comenzó en ese mundo?

– Esto comenzó un poco como todo, subiendo cosas porque te gusta. Empecé con Facebook, subiendo algún vídeo sobre algunas telas. Luego, por consejo de mi sobrina empecé en Instagram, pero de un modo algo más serio. Y ahora, gracias a la ayuda de mi sobrina, y de todo el contenido que subimos tenemos casi 13.000 seguidores, que es algo que a veces me cuesta asimilar.

–¿No es habitual que una tienda de estas características sea tan conocida en redes verdad?

–Hay otras tiendas de telas que tienen muchos seguidores. Ahora bien, yo no me imaginaba que mi cuenta de Instagram fuese a llamar la atención de esa manera.

–¿Esta posición en las redes ha tenido algún impacto en la tienda?

–Desde luego. Yo hay veces que me quedo muy sorprendida. Viene gente de todas las partes. Hay personas que aprovechan sus viajes a Euskadi para venir a Errenteria y acercarse a la tienda. Son cosas que hace unos años eran inimaginables, pero que gracias a una buena gestión de redes me ha ayudado. Ahora, además de la gente que viene, son los pedidos de telas que me hacen. Desde Canarias y desde Ceuta me envían mensajes para poder conseguir telas. Es algo increíble.

–Por otro lado, ¿qué cree que necesita el pequeño comercio para poder seguir?

– Yo diría que el pequeño comercio, por lo menos en Errenteria está bastante bien valorado ya que hay un arraigo de comprar en las tiendas de la localidad. Es cierto que vienen nuevas maneras de comprar, y creo que hacer frente a estas nuevas tendencias puede ser complicado. Quizás tendríamos que conseguir que los jóvenes comprasen más en estas tiendas. Es complicado porque tienen otra manera de ver las cosas, pero creo que se puede conseguir. Por otro lado, la ayuda de las instituciones es necesaria, y es cierto que tenemos ayudas con los bonos, pero creo que necesitamos más cosas.

–Por último, ¿qué representa este negocio para usted?

–Yo te diría que es ilusión. Es algo a lo que le entrego todo durante todos los días desde hace nueve años. Por suerte he conseguido que mi afición sea mi trabajo, pero desde luego que este sitio, al que vengo desde que soy una niña, le tengo mucho amor, y espero que la gente que viene a comprar aquí lo note en el trato.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco «Viene gente de todas las partes a verme, es algo que a veces no me creo»