Lezo

Un homenaje a quienes viven del caserío

Tres días después de que Lezo estallara de alegría con el chupinazo de sus fiestas patronales, el Baserritarren Eguna puso punto final ayer a los Santakru-tzak 2024. Los actos que arrancaron con el pregón leído por las alcaldesas 'txikis' June Gómez Ugalde y Haizea Arrieta Aranburu se cerró con el Baserritarren Eguna, una jornada que sirve de homenaje a cuantos viven del caserío, perpetuando trabajos que se remontan varios siglos atrás en el tiempo.

Los protagonistas de este día abrieron, a las 09.30 horas, una feria de ganado que atrajo a centenares de personas. Curiosos y visitantes tuvieron la oportunidad de contemplar los animales que ocuparon Goiko plaza.

Entre ellos, se encontraban las vacas pirenaicas criadas en Darieta Berri, Olatzar y Sagarzulo, las limusinas procedentes de Txartiku y Gazteku y las de raza blonda llegadas de Juantene.

Los equinos de Gaztelu, las ovejas lachas de Torreatze y los bueyes de Darieta Berri y Borda completaron esta exposición pública.

Fueron precisamente los bueyes los que acapararon la atención, a partir de las 12.00 del mediodía, cuando diferentes ejemplares entraron en liza en el probadero. Niños y adultos permanecieron expectantes hasta que las pruebas concluyeron.

Aún quedaba tiempo para divertirse con otras propuestas que se desarrollaron a lo largo de la tarde, como la fiesta de la espuma, la merienda infantil, la salida de gigantes y cabezudos y la actuación de bertsolaris.

Al anochecer, el toro de fuego simbolizó la despedida que dio lugar a sentimientos encontrados entre los vecinos de Lezo.