El paso del Tour retrasa a julio las obras del último tramo del bidegorri Lezo-Pasai Donibane

Una solicitud que atañe de forma directa al bidegorri que conecta Lezo y Pasai Donibane, cuyo tercer y último tramo estaba previsto comenzar a construirse en abril. La necesaria colaboración entre instituciones y la aceptación de la propuesta realizada por el Gobierno Vasco por parte de la Diputación de Gipuzkoa hace que el inicio de los trabajos vayan a posponerse hasta el mes de julio, una vez la Grande Boucle abandone Euskadi.

Y es que el bidegorri Lezo-Donibane se localiza en las faldas del monte Jaizkibel, por donde pasará la segunda etapa del Tour (Vitoria-San Sebastián) el 2 de julio. Los ciclistas, además, subirán en esta ocasión el alto desde Hondarribia, por lo que el paso por la zona donde se acometerán las obras se realizará a gran velocidad tras el descenso del puerto.

Así lo ha anunciado este jueves la diputada de Movilidad y Ordenación del Territorio, Rafaela Romero (PSE), durante la presentación del proyecto. Con un plazo de ejecución de 5 meses, las obras estarán finalizadas y la vía ciclista culminada en diciembre, en lugar de en septiembre/octubre como estaba inicialmente planeado.

A diferencia de los dos tramos ya activos, este último no discurrirá sobre la acera o calzada ya existente, sino que se construirá un voladizo sobre el puerto sobre el que irá el bidegorri, de 3 metros de anchura útil. Será un recorrido de 270 metros para los que se destinará un presupuesto de 1,5 millones de euros. Esta obra, ha subrayado Romero «completará el círculo de movilidad activa en torno a la bahía de Pasaia, dando un paso más en el proceso de transformación y revitalización de la zona». En este sentido, la diputada socialista ha subrayado que «la regeneración de Pasaialdea es una de las líneas estratégicas» para su departamento, que en la presente legislatura «ha invertido 9 millones de euros en acciones como la construcción de la cubierta transitable de la lonja, el aparcamiento de Trintxerpe o el nuevo espacio para uso ciudadano en la cubierta de los pabellones de Herrera oeste» y que «con la culminación del bidegorri habrá destinado en cuatro años más 10 millones a mejoras ciudadanas» en el entorno del puerto.

La ejecución del tramo se divide en tres fases. En la primera se desviará el servicio de saneamiento para tener espacio en el que implantar, en el carril sentido Lezo, las estructuras sobre las que asentar el bidegorri. Se habilitará un itinerario provisional alternativo, que estará en servicio durante las siguientes fases con el objetivo de compatibilizar el tráfico peatonal con la ejecución de las obras. Se ha establecido un trazado por el puerto, adyacente a la zona de obras, con la implantación de sendas rampas de bajada mediante andamiaje en ambos extremos de la obra, que permitan salvar la diferencia de cotas entre la explanada del puerto y la carretera. También existirá un itinerario peatonal a lo largo del pie del talud actual entre ambos puntos.

En una segunda fase se ejecutará el objetivo principal del proyecto, la implantación del voladizo. La tercera y última será el remate del bidegorri con el extendido de la capa de rodadura y la señalización.

Romero ha finalizado la presentación del proyecto destacando que «además de la interconexión en materia de movilidad, la culminación del bidegorri supondrá un gran avance en materia de seguridad, ya que se amplía de forma considerable el espacio para los peatones y ofrece a los usuarios de bicicleta un espacio más seguro, apartado de la calzada».