Pasaia

El proyecto constructivopara demoler el viaducto de Pasai Antxo, a licitación

Este plan se ha desarrollado en tramos sucesivos, con el objetivo de aumentar la capacidad operativa de la línea y, en consecuencia, mejorar la oferta ferroviaria en el área metropolitana.

Así lo manifiestan desde Movilidad Sostenible a través de una nota de prensa. En ella, la consejera explica que el derribo del viaducto que divide la población ha sido «una prioridad para mí y para mi predecesor, Iñaki Arriola, y por esa razón, es una gran noticia que desde Euskal Trenbide Sarea hayamos sacado la licitación del proyecto de derribo». García Chueca recuerda que «hay pocos lugares en Euskadi con una presencia tan implacable del tren como en Antxo y por eso, me alegra que desde ETS estemos dando pasos adelante para que, cuando terminemos la obra de la pasante soterrada entre Altza y Galtzaraborda y esta se encuentre en marcha, podamos avanzar en el derribo del viaducto y en la urbanización de los espacios que liberemos para el uso y disfrute de la ciudadanía».

Desde finales de 2016 está en servicio el tramo comprendido entre Herrera y Altza. En noviembre de 2021 arrancaron las obras del segmento Altza-Galtzaraborda, que incluyen la construcción de una nueva estación soterrada en el centro de Antxo, actualmente en ejecución. Una vez que se ponga en servicio esta infraestructura, prevista a lo largo del próximo año, la antigua terminal y el viaducto quedarán en desuso y dejarán de tener sentido, por lo que desde el departamento de Movilidad Sostenible se decidió su demolición.

El viaducto, de unos 350 metros de longitud, cuenta con dos tramos diferenciados, el primero entre viviendas y el segundo sobre el río Molinao, que además ejerce de puente. El proyecto que ha salido a licitación deberá determinar a través de un estudio de alternativas cuál es la mejor solución para la eliminación de esta barrera física en el entorno urbano y paisajístico de Pasai Antxo, y estudiar si el derribo afecta únicamente al entorno más urbano manteniendo para otros usos a futuro la infraestructura sobre el río o si la demolición también alcanza a esta segunda parte.

Asimismo, este informe tendrá que proponer la posterior regeneración del espacio ocupado en la actualidad por el viaducto y la estación elevada del ferrocarril. Es decir, definir el tipo de urbanización más adecuado para esta zona.

En este mismo contexto, ETS sacó a licitación la semana pasada la redacción del proyecto constructivo para la cubrición de las vías en el ámbito de Galtzaraborda, en Errenteria, que minimice el impacto visual y acústico del tren en esta zona, y que forma parte del eje Altza-Galtzaraborda.

La contratación de la redacción del proyecto de derribo del viaducto del topo de Pasai Antxo es «una noticia importante para nuestro pueblo». Así lo valoraba este viernes el alcalde de Pasaia, Teo Alberro.

Según explicaba, «conviene recordar que esta medida viene tras una vieja demanda de los antxotarras. Tras esta reivindicación ha habido movilizaciones, interpelaciones institucionales y más de 1.400 firmas, y es gratificante ver que el trabajo ciudadano ha dado su fruto».

El proyecto que ha salido a licitación tiene como objeto «la redacción de un proyecto para eliminar y/o integrar este obstáculo físico, y determinar el tipo de urbanización más adecuada para el espacio que actualmente ocupa el viaducto». A raíz de esta afirmación, el Gobierno municipal de Pasaia reivindica que, para definir la naturaleza de este espacio, es «fundamental» escuchar la palabra de los antxotarras. Es por ello por lo que, tras conocer la noticia, el alcalde solicitaba ayer una reunión a la consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca.

Alberro destacaba que la puesta en marcha de la redacción de este proyecto permitirá pensar de manera «más integral» en el Antxo del futuro, recuperando nuevos espacios para la ciudadanía. «Considero que el Ayuntamiento debe ser participe de este proyecto, ya que siendo la institución más cercana a la ciudadanía hará que primen sus deseos e intereses», subrayaba.

En consonancia con ello, Alberro confirmaba que el Gobierno municipal seguirá trabajando por un Antxo «más habitable y sostenible». «El derribo del viaducto eliminará la barrera física que divide en dos el distrito, y abrirá la posibilidad a nuevos espacios amplios que Antxo tanto necesita, mejorando la accesibilidad en el centro y eliminando muchos puntos oscuros», manifestaba.

Para finalizar, el alcalde recordaba el compromiso que tiene su gobierno con dar una respuesta «integral» al futuro de Antxo. Entre los proyectos que tienen entre manos, destacaba tres: la reurbanización de Gure Zumardia en base a los criterios acordados con la ciudadanía en el proceso de participación llevado a cabo por el Ayuntamiento, la reconversión del antiguo edificio de oficinas de Luzuriaga como el centro sociocultural de Antxo y la recuperación de los espacios actualmente ocupados por el viaducto del Topo para el disfrute de la ciudadanía.