Al sainete de Don Juan Carlos contra Miguel Ángel Revilla sólo le faltaba que el cántabro se enterara de la demanda disfrazado de juez en ... una película de Resines. Podría hablar del efecto Streissand o del dicho 'pour vivre hereux vivons cachés' (para vivir felices vivamos escondidos). En Abu Dabi o donde sea. ¿Qué consejeros chungos puede tener Don Juan Carlos para animarle a esta demanda o para no quitarle la idea? Para ponerse a tiro. Y da igual si se trata de asustar al personal empezando (y quizá acabando) con Revilla.

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Hace unos meses doce personas, entre ellos Martín Pallín o Carlos Jiménez Villarejo, presentaron una querella por delitos fiscales contra el anterior monarca. La Fiscalía del TS informó a favor de inadmitir y archivarla (por hechos ya investigados y archivados). Esos doce estarán encantadas al reavivarse los asuntos feos de Don Juan Carlos. Si tengo que elegir, me quedo con este. Por lo menos no tengo que escucharle.

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