Cómo es posible que la seguridad en las viviendas no haya mejorado nada tras la instalación de tantas alarmas? Imagino que ustedes también se han dado cuenta de que algo falla. Estamos hablando de empresas que han tenido que vender mucho para permitirse machaconas campañas ... de publicidad. El negocio ha sido un éxito, pero, al parecer, la problemática está enquistada. Tal vez esos sistemas no sean eficaces o tal vez el éxito de las alarmas esté basado –y es curioso– en una falsa alarma, y, por ello, la situación sea similar a la que se daba antes del auge de este negocio. Puede que la segunda hipótesis resulte imaginativa pero, en todo caso, el mejor cortometraje de ficción que he visto este año es, precisamente, el anuncio de una empresa de seguridad en el que una pareja de cuarentañeros se ha comprado un casoplón «para las vacaciones». Igual pretendían que lo que más nos llamara la atención al verlo fuera que no hubieran instalado una de esas dichosas alarmas.
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