

Secciones
Servicios
Destacamos
el diario vasco
Miércoles, 20 de junio 2018
Este verano pon destino al Caribe, y si crees que no está a tu alcance, ahora te proponemos 10 destinos para todos los bolsillos en el corazón del Caribe.
Aunque parezca mentira, el verano ya está a la vuelta de la esquina. Tras meses de lluvia y frío, la mente pide vacaciones, sol y relax. Una combinación que tiene su máximo exponente en el Caribe. Las interminables playas paradisíacas de la Rivera Maya, Punta Cana o Varadero se imponen por su atractivo con kilómetros de arena blanca y fina, aguas cristalinas y de un azul turquesa intenso. Un destino idílico para todos los gustos y bolsillos en los que desconectar y disfrutar de la naturaleza más apabullante. Si estás preparando las vacaciones y buscando inspiración viajera, apunta estos destinos de ensueño.
Es el gran tesoro caribeño y uno de los destinos más solicitados. Las bellas playas de Punta Cana con extensiones de cocoteros que se pierden a la vista, sus aguas cristalinas y sus calma son un reclamo turístico de primer orden. Esta zona paradisíaca cuenta con alguna de las playas más espectaculares del mundo como son playa Bávaro, playa Uvero Alto, Macao o El Cortecito. Pero no son sus costas el único atractivo porque la naturaleza más salvaje las envuelve creando un paisaje tan delicioso como repleto de una rico flora y fauna.
Si lo tuyo no es estar todo el día tirado tostándote al sol, esta zona de República Dominicana ofrece muchas más opciones a través de excursiones y rutas para disfrutar de su esplendor natural como safaris en todoterreno, quads o monster trucks por la jungla o visitas a sus cataratas, islas o el famoso cenote Hoyo Azul, sin olvidar que es un lugar perfecto para practicar deportes acuáticos como buceo, snorkel, wakesurf o kitebording.
Cultura, playa y un paraíso foodie, Riviera Maya combina todos embrujos necesarios para elegir destino de vacaciones. Una visita a la zona más popular de México debe empezar siempre buscando los vestigios de la cultura maya en los espectaculares Chichén Itzá o Tulum. La primera, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está considerada una de las nuevas siete maravillas del mundo moderno. Fue una de las ciudades mayas más importantes y hoy destaca por su impresionante pirámide de Kukullán. Tulum, por su parte, fue una ciudad amurallada maya. También está declarada Patrimonio de la Humanidad y cuenta con unas espectaculares vistas de sus ruinas mayas sobre un acantilado frente al mar Caribe. No hay que dejar de visitar El Castillo, el Templo de los Frescos y el Palacio, al igual que su gran cenote con unas postales subacuáticas inolvidables.
Las playas turquesas de Riviera Maya son el otro imprescindible. Playa del Carmen es la más emblemática con sus interminables kilómetros de arena y múltiples opciones para practicar deportes acuáticos tales como buceo, snorkel o avistar delfines. Playa Maroma es otra de las de obligada visita. Y, por supuesto, el otro must es la animadísima vida nocturna de la zona donde se puede conocer de primera mano el auténtico ritmo caribeño. Margaritas, micheladas, Coco Loco… y que no pare la noche.
La capital de las Bahamas es un popular puerto para los cruceros. Sus playas y los arrecifes de coral frente a sus costas la han convertido en un destino célebre. El submarinismo y el esnórquel son dos de los deportes más practicados en la localidad, que guarda muchos de sus pintorescos edificios de colores de la época colonial británica.
Los centros turísticos y tiendas de moda de lujo llenan Bay Street, el principal centro comercial de Nasáu. Los productos de artesanía son habituales en el mercado de Straw Market, así como las típicas piezas de joyería hechos con caracolas. La gastronomía de Nasáu se divide entre los sofisticados restaurantes y los negocios de caracolas que se agolpan frente a la costa. Desde el Fuerte Fincastle.
Enamoró a Federico García Lorca, a Hemingway y a cualquiera que ponga sus pies en la mayor ciudad del Caribe. La capital de Cuba es un destino único para unas vacaciones: buen clima, vida intensa con música en cada esquina, atractivos turísticos espectaculares, una oferta culinaria deliciosa y rincones dignos de postal. La Habana combina la decadencia y la majestuosidad casi como ninguna ciudad del continente americano.
Su centro urbano está considerado uno de los de mayor riqueza cultural del mundo. De hecho, La Habana Vieja es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO ya que este barrio alberga más de 900 monumentos como el Palacio Presidencial, que alberga el Museo de la Revolución, la Plaza de la Catedral o el Capitolio. No hay que dejar de pasear por el Malecón; pasar por la esquina Caliente, cerca de la estatua de José Martí en el parque Central; darse una vuelta por los mercados de libros de la plaza de Armas o asomarse a la del Cristo, una de las zonas más candentes de la ciudad.
Varadero es la joya de la corona de Cuba. Su clima tropical, una vida insólita y animada y un paisaje con unas playas de infarto son el atractivo de esta región cubana. Evidentemente, su larguísima costa de más de 20 kilómetros es la cara más conocida de Varadero, pero no es el único regalo que esconde. Lugares como la Reserva Ecológica de Varahicacos merecen una visita para admirar su impresionante variedad de flora y fauna, pero sobre todo la Cueva de Ambrosio, con más de dos millones de años de antigüedad y 47 pinturas precolombinas en su interior.
La zona es ideal para bucear o hacer snorkel y también para jugar al golf. No obstante, otras visitas imprescindibles son las más urbanas con la Casa del Ron o la Feria de los Cayenes como mejor estandarte de la animada vida cultural cubana, con permiso de su ron y su rica gastronomía.
No tiene mucha fama turística, pero Guatemala es un destino de primer orden que funde patrimonio cultural y colonial con sitios arqueológicos, parajes naturales, cultura, modernidad y gastronomía. Una combinación perfecta para aquellos viajeros que disfrutan con el placer de conocer sitios con pocas aglomeraciones con esa sensación de explorador. La ruta por el país puede comenzar en el norte, en la Reserva de la Biosfera Maya, una impresionante selva con ruinas como las de Tikal. En la zona también merece una parada la Playa de Livingston, una preciosa extensión de arena blanca y aguas cristalinas, al igual que las playas Blancas o de Quehueche. El Alta de Verapaz es una de las reservas naturales más importantes del país repleta de cuevas, saltos de agua, animales exóticos…
Las Cataratas de la Igualdad merecen otra visita. Considerado por muchos el salto de agua más espectacular del planeta, es la más alta de Centroamérica con una altura de 187 metros. Además, para llegar a ella hay que pasar por las faldas del Volcán Tajumulo. Por su parte, ciudad de Guatemala combina la mejor arquitectura con el Palacio Nacional de la Cultural, la Plaza Central o la Catedral Metropolitana como principales reclamos. También hay que parar en el lago de Aittlán, que Huxley definió como «el bello del mundo», o Antigua Guatemala, una ciudad colonial Patrimonio de la Humanidad con atractivos como el Palacio de los Capitanes Generales, el Palacio Noble del Ayunamiento o el Centro Cultural La Azotea y que, además, está ubicada en el que, dicen, es el valle donde se produce el mejor café del mundo.
Frente a las costas de Venezuela, con un clima soleado y seco, de playas de arena blanca y mares en calma, Aruba no pasa desapercibida. De marcado carácter europeo, su arquitectura es fiel reflejo de la influencia holandesa en la isla. Además del holandés, sus gentes hablan en inglés y español, además de la lengua local, el papiamento.
Oranjestad, su capital, es el principal punto comercial de la isla. Reúne desde mercados al aire libre a restaurantes, casinos y clubes nocturnos. Al norte de Aruba se encuentran los grandes complejos turísticos, mientras que es la costa oeste donde se pueden encontrar sus populares cuevas y minas abandonadas.
La capital de Puerto Rico es la ciudad más grande de la isla. La Isla Verde reúne los más populares locales de ocio, casinos, bares y clubes nocturnos, además de las más amplias playas de la ciudad.
Contrasta la zona más turística con El Viejo San Juan, un espacio herencia de la época colonial española, con grandes fortalezas que regalan una panorámica de la amplitud del océano. Sus museos y galerías, el distrito de Santurce y su inagotable música y comida ponen la guinda a una visita obligada para todos los que quieren algo más que playa en este bello rincón del planeta llamado Caribe.
Además de ser el lugar de nacimiento de Rihanna, Barbados es una pequeña nación independiente que todavía hoy bebe de su pasado británico. Su gran vegetación y sus playas de arena blanca y aguas turquesas la han convertido en uno de los destinos más populares del mar Caribe.
Los grandes hoteles y los campos de golf se suceden frente a una costa oeste de mares en calma. Al sureste, los aficionados al surf encontrarán las grandes olas, especialmente en Soup Bowl. La playa de Crane es famosas por sus arenas rosas, mientras que Silver Sands es popular por la práctica del surf a vela. Y a todo eso hay que añadir el constante tránsito de cruceros que anima el ir y venir de esta pequeña isla.
La República Dominicana presume de tener por capital a una de las ciudades más antiguas del Caribe. Famosa por su amurallado centro histórico, con los famosos adoquines, vestigio de la época colonial, todavía conserva edificios del siglo XVI, incluyendo la catedral, la primera construida en América.
Sus cafés y restaurantes animan el ir y venir de las gentes por sus serpenteantes calles y caminos. Los visitantes no pueden perderse el Jardín Botánico Nacional, lugar de exposición de las plantas nativas. Ah, y nada de despedirse de la ciudad sin bailar al ritmo del merengue o la bachata.
Publicidad
Patricia Rodríguez e Izania Ollo | San Sebastián
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.