Borrar

Crónica del desnorte

Rajoy y Urkullu aspiran a la reelección, el primero dispuesto a continuar en solitario, el segundo obligado a diferenciarse de España mediante alguna coalición

Kepa Aulestia

Sábado, 30 de julio 2016, 08:01

La preceptiva ronda de consultas del Rey con los distintos grupos parlamentarios para proponer un candidato a la investidura como presidente del Gobierno culminó el jueves con otra muestra de la prepotencia evasiva de Mariano Rajoy, sin que nadie de sus próximos aclarara ayer si ... se someterá a la confianza del Congreso. La democracia es un sistema de procedimientos tasados. Las formas son el fondo cuando un candidato a la presidencia convierte la 'propuesta' del monarca en algo así como el 'encargo' del Jefe de Estado de una república. En una invitación que puede aceptarse a verlas venir. La forma de Estado -la Monarquía parlamentaria- es una contingencia que no tiene por qué respetarse al pie de la letra, según algunos dirigentes populares. Sobre todo cuando se producen circunstancias excepcionales, imprevistas por los constituyentes, que obligan a Rajoy a declinar un día y a tomarse su tiempo al siguiente. Las formas son el fondo cuando se produce un solapamiento tan obsceno entre el ejercicio de la presidencia en funciones durante más de siete meses y la candidatura a la reelección. La continuidad en el poder lo impregna todo. La vicepresidenta y los ministros se refieren al futuro inmediato como si en realidad ya se hubiese consumado la investidura.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco Crónica del desnorte