Los audios de Jésica a Koldo: «No tengo ni puta idea de lo que se hace allí»

Este periódico ha tenido acceso a varios audios enviados por la pareja Ábalos al asesor del también secretario de Organización del PSOE en la época investigada. En ellos, Jésica se queja de su situación -el cuestionamiento que se le trasladaba- y lamenta que en la empresa pública estuviesen siendo últimamente «un poco estúpidos». En concreto, relata que le estaban haciendo mandar el parte laboral «todas las semanas» y que había tenido que pedir con antelación los días de vacaciones: «Es que yo nunca he trabajado con una jornada de verano, entonces yo no he caído en que estamos en junio«.

Asimismo, la expareja de Ábalos hace referencia a la zozobra que entonces decía experimentar por no tener vivienda propia. «Bastante incertidumbre es no tener un sitio donde poder plantar el culo», le llegó a decir a Koldo García en uno de estos mensajes grabados. En otro, Jésica no dudó en lanzar una advertencia a su interlocutor: «Yo te lo digo, o sea a mí me la suda, porque yo no me voy a comer ningún marrón». «Yo lo digo más que nada por vosotros, yo intento hacer las cosas bien«, se le escucha decir.

Además, Jésica también manifestó su enfado cuando la trama dejó de pagar el piso de lujo en la Plaza de España de Madrid donde vivió tres años con un arrendamiento que abonaba la trama: «Es una situación súper desagradable», se dolió, con tono contrito, al que fuese mano derecha de Ábalos, con el que guardaba una relación de confianza según se desprende de los audios recogidos en la instrucción judicial. «No quiero y no creo que me merezca que nadie me llame para decirme que deje la casa. Es lo único que pido», llegó a manifestar.

Jésica vivió en este inmueble pagado por la red investigada aproximadamente entre marzo del año 2019 y marzo de 2022. Cuando comenzó a residir en esa vivienda, el alquiler ascendía a 2.700 euros mensuales y fue cubierto inicialmente por el empresario Víctor de Aldama a través de su socio Luis Alberto Escolano. Posteriormente, la renta quedó en manos de Koldo García o de su hermano Joseba.

En estos audios, de hecho, esa vivienda supone la principal preocupación para Jésica. «Lo único que hemos conseguido es que me digan que yo mañana me voy a la puta calle», recoge otro de los mensajes de voz enviados a Koldo.

La entonces pareja del exsecretario de Organización socialista también habla sobre su futuro y su deseo de no tener que depender de nadie para permanecer en un sitio el tiempo que desee: «Espero el día de mañana tener mi casa y no rendir cuentas a nadie».