Urkullu: «Mi compromiso va a seguir siendo por la unidad del partido»

Iñigo Urkullu, quien estuvo rodeado en todo momento por los suyos, por su esposa Lucía Arieta-Araunabeña, sus hijos y sus nietos, agradeció el apoyo y recalcó que «siempre he pretendido que el concepto de pueblo debía unir a todos a pesar de nuestras diferencias». «He trabajado desde la cohesión social desde un nacionalismo solidario», remarcó Urkullu, quien una vez finalizado el acto subrayó a los periodistas que de lo que se trata en el proceso que vive ahora el partido es de elegir «a las mejores personas que puedan dirigir el partido en un proceso natural y democrático al que nos presentamos todos sabiendo cuáles son las reglas». «No se trata de diferencias ideológicas, como en el pasado», añadió.

«Estoy convencido de que cuando pase la Asamblea General (de finales de marzo) remaremos todos ya en la misma dirección nuevamente», afirmó reconociendo de forma implícita la fractura ahora existente, que se evidenció en la evidente incomodidad entre Ortuzar y Esteban. A los dos apenas de se les vio juntos y sus conversaciones fueron breves, al menos públicamente.

Urkullu estuvo arropado también por su otra familia: el PNV. El acto celebrado en el centro cultural San Agustín, un antiguo convento ubicado en el centro de Durango, contó con una amplia representación política institucional. Allí estuvieron cargos en activo, como el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto; la regidora de Durango, Mireia Elkoroiribe; la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe; el presidente del Bizkai buru batzar, Iñigo Ansola; o el actual consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, que ejerció de responsable de Cultura y portavoz con Urkullu en Ajuria Enea.

Porque de lo que se trataba, sobre todo, era de rendir un homenaje y expresar el reconocimiento de los jeltzales a su «trayectoria, compromiso, dedicación y esfuerzo al servicio de nuestro país». Hacer un recorrido por su vida personal y política.

Y pocos de los que compartieron en las instituciones quisieron faltar a la cita. Por la villa foral pasaron buena parte de quienes fueron sus consejeros en sus trece años en Ajuria Enea: Josu Erkoreka, Jon Darpon, Gotzone Sagardui, Pedro Azpiazu, Arantza Tapia...

Y no solo del mundo de la política, También hubo invitados del mundo de la cultura o de la empresa, entre otros, Fran Azpiazu, de Cebek; el presidente de Euskaltzaindia, Ander Urrutia; o el director del Museo de Bellas Artes de Bilbao, Miguel Zugaza. A todo ellos se sumó también Miguel Ángel Revilla.

«Es el político más serio que he conocido en mi trayectoria, riguroso, tenaz... Es el prototipo de esa seriedad que representa al pueblo vasco», afirmó el expresidente de Cantabria. A él se sumó la expresidenta de Navarra por Geroa bai, Uxue Barkos, el exjugador del Athletic, Andoni Goikoetxea, -«has sido un gigante, como yo en el fútbol»- y el presidente de Iberdrola. Ignacio Galán le definió como un «docente por su paciencia y profundidad en los análisis y su capacidad de influir en las personas». «Dejas una Euskadi mejor», afirmó Galán.