Secciones
Servicios
Destacamos
Cierre de filas a ambos lados de la muga. Euskadi, Navarra y Nueva Aquitania presionarán ante Francia y la UE para que el Gobierno galo no retrase la construcción del tren de alta velocidad. El lehendakari, Iñigo Urkullu, y los presidentes de la Comunidad foral ... y del vecino departamento francés, María Chivite y Alain Rousset, respectivamente, han coincidido este lunes en la necesidad imperiosa de que la conexión Dax-Hendaia se construya en los plazos previstos. Los tres compartieron diagnóstico sobre el negativo impacto económico y medioambiental que supondría el retraso de esta infraestructura. Lo hicieron en la reunión anual de la asamblea de la Eurorregión, entidad constituida en 2011 por los territorios para promover la cooperación transfronteriza.
La convocatoria se realizó con anterioridad a que surgiera la controversia por la decisión francesa de aplazar de 2030 a 2042 la conexión del tren de alta velocidad entre Burdeos y Dax, sin mencionar siquiera la continuación hasta Hendaia. No estaba en el orden del día pero, como era de esperar, este tema centró gran parte del contenido de la reunión, que tuvo lugar en el Ayuntamiento de Donibane Garazi.
El lehendakari subrayó en la rueda de prensa efectuada tras el encuentro que tanto él como Chivite y Rousset se han comprometido a reclamar la conexión ferroviaria ante los gobiernos francés, español y la UE. En este sentido, señaló que la creación de una macrorregión del arco Atlántico «cobra todo su sentido».
Urkullu denunció que según se desprende del Informe de la Comisión de Orientación de infraestructuras francés, todo apunta a que la conexión Burdeos-Dax no verá la luz hasta 2042, a lo que se añade que el enlace con Hendaia y la 'Y' vasca no tiene prevista fecha de ejecución. «De materializarse este escenario, supondría un grave incumplimiento de los compromisos que se contemplan el Reglamento TEN-T europeo. Esta situación -lamentó el lehendakari- causa una gran preocupación tanto en Nueva Aquitania como en Euskadi y Navarra porque la fachada atlántica quedaría descolgada de la trama de corredores que recorren la geografía de la UE, lo que afectaría al desarrollo económico y social de nuestras comunidades».
Urkullu afirmó que a los tres territorios les une el mismo objetivo de impulsar y reforzar la posición de la Eurorregión para no quedarse fuera del «foco europeo» y tener capacidad de influir en las decisiones que se adopten en la UE.
Urkullu, preguntado sobre la respuesta de Macron a la carta que le envió como presidente del Comité de Trabajo de los Pirineos, explicó que la respuesta no resultó satisfactoria. «Manifestaba su compromiso genérico, sí, pero unos días más tarde esa respuesta se veía muy cuestionada por los informes franceses que retrasan el tramo ferroviario».
La presidenta de Navarra también consideró necesario «presionar» para que el proyecto sea una realidad. Chivite subrayó que la Comunidad foral padece un intenso tráfico de camiones y que resulta imprescindible que parte del transporte de mercancías se traslade al ferrocarril. Chivite subrayó que «todos tenemos que hacer fuerza para que Francia cumpla con los plazos que comprometió ante Europa».
Por su parte Alain Rousset se mostró partidario de apoyar «todas las iniciativas políticas colectivas» a ambos lados de la frontera para desarrollar el TAV. El presidente de Nueva Aquitania aseguró que la mejora del actual trazado ferroviario entre Dax y Hendaia no resuelve el problema y que, en consecuencia, la solución pasa por el TAV. Es más, calificó de «aberrante» que Francia impida que España mire a Europa y que el retraso podría hacer peligrar la financiación de la UE.
La respuesta unánime de la Eurorregión supone un peldaño más en la iniciativa que lidera el lehendakari para evitar que el Arco Atlántico quede «fuera de foco» de la UE. La primera llamada de atención tuvo lugar el lunes de la semana pasada cuando Urkullu reunió en Ajuria Enea al regionalista Miguel Ángel Revilla (presidente de Cantabria), al socialista Adrián Barbón (Asturias) y al popular Alfonso Rueda (Galicia) para analizar el impacto del retraso en las conexiones del TAV francés en la cornisa cantábrica. Los presidentes acordaron ejercer como un 'lobby' para presionar a Francia, España y la UE con el objetivo de que el Arco Atlántico no quede relegado.
Con este fin se propondrá la creación de una Macrorregión Atlántica. La oportunidad para constituir ese órgano vendría dada durante la presidencia española del Consejo de la UE en el segundo semestre de este año.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.