«Lo más gratificante es que las víctimas sienten el museo como propio»

–¿El público viene expresamente a ver el Memorial o son personas de visita por Araba?

–Vienen muchos vitorianos pero también turistas de otras comunidades. Nos han visitado 30.000 personas, la mitad de Euskadi y Navarra, y de ellos el 70% es alavés. Les siguen Madrid, Cataluña y Andalucía. Además, un 5% son extranjeros. El Memorial ya se ha situado como uno de los lugares a visitar en Vitoria.

–¿Han cumplido entonces las expectativas?

–Sí, pero tenemos que ser ambiciosos y aspiramos a más porque buena parte de los tópicos que ya estaban presentes en el espacio público y que motivan nuestra fundación siguen estando ahí como el de que hubo un conflicto con dos bandos o el de la ETA buena antifranquista. Todo eso se desmonta en esta exposición. El Memorial refleja todos los terrorismos y contribuye a la conversación pública, a que se hable más de un tema sobre el que hemos callado durante demasiado tiempo. Y lo más gratificante es, sin duda, que cuando lo visitan las víctimas lo sienten como propio.

–Han visitado el centro muchos políticos, ¿alguno de EH Bildu?

–No me consta, igual lo han hecho a título particular. Está claro que todavía tienen un largo camino por recorrer.

–¿Verles aquí sería síntoma de que las cosas van cambiando?

–Antes tienen que hacer muchas otras cosas, un reconocimiento no solo clínico del daño causado sino de lo inmoral que fue. Luego ya veremos. Pero veo prácticamente imposible que lo vayan a visitar. Además, no les iba a gustar lo que iban a ver porque salen mal retratados.