Interior acerca a once presos de ETA en el mayor movimiento en dos años

Desde que hace algo más de dos años el propio presidente del Ejecutivo central abriera la puerta a un cambio en la política penitenciaria, el Ministerio del Interior ha insistido en que por legal que sea, no existe una estrategia, sino que se trata de decisiones individuales. Pero el goteo es constante. La media es de seis traslados a la semana. Solo en octubre se elevó dicho número hasta los ocho. La cifra de ayer, víspera de Nochevieja, es de doce: la suma de la media docena de esta semana y la de la pasada, cuando no se notificó ninguno por coincidir con Navidad. Entre otros, a Juan Carlos Iglesias Chouzas, alias 'Gadafi', que acumula una veintena de atentados a sus espaldas, entre ellos el del niño de dos años Fabio Moreno en Erandio y otros siete asesinatos en Bizkaia.

Tan solo uno de lo once etarras que serán acercados no tiene condenas por asesinato o atentado –Iker Lima Sagarna–. Y todo apunta a que será una constante a partir de ahora. De los ochenta internos de ETA que no han sido aún trasladados, el 70% tiene delitos de sangre. A modo de balance, han sido un total de 130 los presos de la banda que han sido acercados, 26 a Euskadi o Navarra. Ninguno de los reclusos que recibió ayer la autorización de Instituciones Penitenciarias ha sido reubicado en el País Vasco. Hasta Pamplona desde Salamanca será acercada María Jesús Arriaga Martínez, exintegrante del comando Nafarroa que cumple una pena de 23 años por el asesinato en grado de tentativa de un policía nacional en 1985.

El resto de internos que figuran en la lista son viejos, y no tan viejos, conocidos. Uno de ellos es José Ignacio Guridi Lasa, condenado el pasado noviembre por la colocación de un artefacto –no llegó a explosionar– en una maceta que se encontraba en el alfeizar de un adosado de Citruénigo. También está en prisión por el asesinato del periodista José Luis López de Lacalle y de dos guardias civiles en Sallent de Gállego. Otro de los reclusos trasladados es Igor Portu Juanena, responsable de la bomba de la T-4 por la que murieron Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate, y del que, tal y como recordó la AVT en un comunicado, ayer se cumplían catorce años. «Si ya es doloroso comunicar a las víctimas que sus verdugos van a ser acercados a sus domicilios, más lo es hacerlo en el día de su aniversario», reprocharon.

El listado de esta semana lo completan Manex Castro Zabaleta, que participó en el atentado contra el empresario Inaxio Uria; Ainhoa García Montero, condenada por los asesinatos de dos operarios de Elektra; Enrique Garate Galarza, que participó en el secuestro del industrial Lucio Aguinagalde; Juan Carlos Besance Zugasti, que mató al exconcejal de UPN José Javier Múgica; así como Francisco Javier Gallaga Ruiz y Fermín Vila Mitxelena, responsables de los asesinatos del sargento Miguel Ángel Ayllón y al policía nacional Luis Ortiz, respectivamente.