Odón Elorza se rebela contra «lo mal parada» que está saliendo del confinamiento la vida política en España, con encontronazos verbales entre partidos que espera que hayan llegado a su límite. «¿Que más puede producirse? ¿Que lleguemos a las manos en el Parlamento?», se pregunta. ... El diputado del PSE-EE en el Congreso y miembro de la Ejecutiva del PSOE augura que a la hora de votar el 12-J se va a tener muy en cuenta la gestión de la pandemia en el conjunto de España y la actitud de los partidos en cada momento, «más que la consecución de alguna transferencia». Sobre futuras alianzas, zanja que «es imposible» un tripartido de izquierdas vasco.
-¿Con noticias como el cierre de Nissan y de graves dificultades en otras muchas empresas, cuántas esperanzas se pueden tener en la recuperación económica?
-Se está produciendo lo que se veía venir y va a costar que la reapertura y funcionamiento de empresas coja ritmo. Va llevar tiempo. Y a mí lo que me ha entrado desde hace semanas es un gran cabreo por lo mal que está resultando la vida política, lo mal parados que salimos los políticos del confinamiento.
-¿A qué se refiere?
-En su globalidad del Gobierno lo ha hecho bien, reconociendo errores diversos, pero las relaciones entre partidos son un auténtico fracaso. En lugar de intentar buscar puntos de acuerdo para afrontar la reconstrucción del país, estamos en el momento de la crispación y de la confrontación entre sectores de la sociedad, provocado por una manera de hacer política desde el odio y la búsqueda de la deslegitimación del Gobierno. Se corre un grave riesgo de que la ciudadanía dé la espalda a la política.
-¿Se superaron los límites con las descalificaciones escuchadas en el último pleno del Congreso?
-Me gustaría pensar que hemos llegado al límite. No puedo pensar que todavía cabe más. ¿Más que eso, qué puede producirse? ¿Que lleguemos a las manos en el Parlamento? Lo del miércoles fue la demostración de que los políticos y los partidos no estamos siendo útiles a la ciudadanía, a los objetivos que ahora se deberían perseguir. En vez de hablar y valorar qué puede empezar a pasar con la financiación europea, estamos centrados en el guirigay del coronel cesado o del mando de la Guardia Civil que dimite.
-¿A qué lo atribuye?
-Creo que lo que yo denomino el frente nacional, de la mano del PP y de Vox, fundamentalmente, no solo está buscando deslegitimar al Gobierno, sino que ha visto la oportunidad, en el marco de la pandemia y de algunas actitudes del Ejecutivo, para judicializar el asunto e ir al acoso y derribo utilizando lo que sea, la bandera, la Guardia Civil…
«Se puede cuestionar la oportunidad del momento elegido para cesar a Pérez de los Cobos, pero para mí es una decisión legítima»
-¿El ministro del Interior se equivocó con el cese del coronel Pérez de los Cobos?
-Se puede cuestionar la oportunidad del momento elegido, pero para mí es una decisión legítima.
-¿No tuvo nada que ver con la investigación del 8-M?
-No. El informe, en cierto modo, leyéndolo y viendo cómo se ha realizado además, se descalifica por sí mismo.
-El informe dice que el Gobierno tenía «pleno conocimiento del riesgo» de la pandemia.
-Es falso. Si el Gobierno hubiera tenido en aquella semana de marzo un criterio formado sólido y riguroso sobre el riesgo inminente de la pandemia y la peligrosidad de la misma en España, no hubiera ido medio Gobierno en la cabeza de la manifestación.
-¿Conocía usted la intención de acordar con EH Bildu para la derogación de la reforma laboral?
-No.
-Hay quien pone en duda que lo supiera incluso el presidente.
-Entiendo que Moncloa lo sabía.
«De momento no se puede renunciar a ningún tipo de acuerdo ni negociación porque la ciudadanía pide diálogo y unidad»
-¿Qué le parece que el acuerdo haya sido posible?
-Hay que situarlo en su contexto. Se corría el riesgo real de no contar con los votos suficientes para sacar adelante la prórroga del estado de alarma. A mí, el acuerdo con Bildu no me aterroriza en una situación como ésta, de una emergencia sanitaria.
«He recibido llamadas y he tenido conversaciones en la calle con víctimas de ETA que estaban muy enfadadas o confusas»
-¿No le parece un acuerdo difícil de explicar a las víctimas?
-Comprendo su enfado. He recibido llamadas y he tenido conversaciones en la calle con víctimas y gente que sufrió el acoso de ETA y del mundo de HB entonces, que estaban enfadadas unas y muy confusas otras. Cuando estos pasos son imprescindibles hay que explicarlos muy bien, con mucha transparencia y franqueza y cuidar el contenido del acuerdo.
-¿La relación entre PNV y el Gobierno de España va por el buen camino, a la vista del último pacto sobre el Ingreso Mínimo Vital?
-En la relación entre el Gobierno de España y el PSOE con el PNV y el Gobierno Vasco ha habido algo reciente que no me ha gustado nada y que no se ha puesto especialmente de manifiesto en Euskadi, y es que el PNV pusiera como condición para apoyar la prórroga anterior, en un acuerdo de varios puntos, que pudieran celebrarse elecciones en el mes de julio más allá de cualquier condicionante que pudiera establecer la permanencia del estado de alarma. Me parece que es un cierto 'chantaje' a la salud pública.
-¿Cómo ve al presidente, aguantará toda la legislatura?
-Sánchez, como todo su equipo, ha madurado con ocasión de esta prueba de fuego de la emergencia sanitaria y ahora con la situación económica y social, la negociación con Europa y el diálogo político. Hay que tener mucha capacidad de gestión, dominio y sangre fría para sacar esto adelante. Me quedo con lo positivo, que es mucho, de la gestión de mi Gobierno, al que defiendo en primera línea como el que más.
-¿Puede llegar a pasarle factura la dura oposición de la derecha?
-La clave en este momento es en qué cuantía van a llegar las ayudas europeas, y cómo eso también puede ayudar a la preparación y aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado, con un carácter plurianual, que tienen que ser necesariamente acordados con distintas fuerzas políticas. No sé si utilizando la geometría variable o logrando el apoyo de la mayoría de la investidura o ambas cosas. De momento, no se puede renunciar a ningún tipo de apoyo ni negociación porque la ciudadanía pide diálogo y unidad.
-¿Se siente cómodo acordando con Ciudadanos?
-Para sacar adelante el estado de alarma, lo he visto necesario y como un alivio. Políticamente, no es cómodo como tampoco lo es llegar a acuerdos con Bildu y más en esa materia pillada por los pelos, pero hay que saber trascender de determinada pureza política.
-¿Los acuerdos con Cs han venido para quedarse?
-Habría que intentar que esa puerta con Ciudadanos siguiera abierta para determinadas materias. Luego hay que ver cómo se concilia, cómo se armonizan esos acuerdos con Cs, con otras fuerzas como PNV, Compromís, Más País o ERC.
-Ve posible esa conciliación de PNV y Ciudadanos?
-Habrá que intentarlo hasta el final, es nuestra obligación.
-¿Qué le parece la no condena por parte de EH Bildu del ataque al portal de Idoia Mendia y a las sedes de partidos?
-Está costando demasiado tiempo a Otegi y compañía dar ese paso. Les falta la voluntad política realmente. Tienen que ser muy explícitos y rotundos. Estoy convencido de que eso llegará y cuanto antes será también mejor para ellos, pensando incluso en términos electorales y de su propia respetabilidad como fuerza política.
-¿Qué le parece que Elkarrekin Podemos siga pensando que es posible un tripartito de izquierdas vasco?
-Es imposible un gobierno tripartito de izquierdas, pero no lo veo yo, ni lo ve el PSE ni el PSOE. Hay poco que hablar sobre eso.
«Si se repite el ejecutivo con el PNV, el PSE debería tomar mayor peso en carteras y capacidad de interlocución»
-¿La mejor opción sería seguir en la senda actual de una coalición con el PNV?
-Si se va a repetir esa coalición, el PSE debería de tomar mayor peso en el Gobierno, en cuanto a las decisiones, en cuanto a las carteras y en cuanto a su capacidad de interlocución como parte del Gobierno Vasco y con un Ejecutivo de España como el actual. Hay unas posibilidades y unas necesidades de cambiar la relación de gobierno entre el PNV y el PSE.
-¿Teme que los réditos de la legislatura se los lleve más el PNV?
-En estas elecciones se va a votar también teniendo muy en cuenta la gestión de la pandemia en el conjunto de España y la actitud que, en cada momento, han expresado y manifestado las fuerzas políticas para contribuir a la defensa de la salud pública y a afrontar con empatía social las repercusiones en la economía, en la vida y en el empleo de las personas. Todo eso va a tenerse mucho más en cuenta que la gestión de unas carteras o la consecución de alguna transferencia. Espero que se valore la responsabilidad que aporta el PSE a la estabilidad del Ejecutivo en Euskadi. El PNV tiene tendencia a patrimonializarlo todo: los gobiernos, aunque sean de coalición, el país…