El PNV apuesta por ir a las europeas con Coalición Canaria y sin Junts

El auto del Supremo que imputa a Puigdemont por su presunta responsabilidad en Tsunami, conocido este jueves, añade grandes dosis de incertidumbre a su futuro político inmediato e incluso a la propia viabilidad de la ley de amnistía sobre la que descansa la legislatura de Sánchez. Pero ya antes del movimiento del alto Tribunal, el PNV había llegado a la conclusión de que los inconvenientes superaban a las ventajas al plantear una eventual coalición con Junts, una opción que el PNV ha sopesado seriamente en los últimos meses en diversas reuniones con la cúpula neoconvergente. La posibilidad de que la tendencia descendente de la sigla pusiera en peligro en unas elecciones de circunscripción única el escaño en Bruselas y Estrasburgo, al que opta la exconcejal bilbaína Oihane Agirregoitia en sustitución de Izaskun Bilbao, llevó al EBB a barajar la entente.

No obstante, Sabin Etxea cree que recuperar esa alianza «desdibujaría» las posiciones políticas del PNV y las diluiría en un proyecto no sólo eminentemente «catalanista» sino sobre todo personalista y «centrado en la figura» del propio Puigdemont. Por esa misma razón, la formación independentista se decantaba desde principios de año, como publicó este periódico, por concurrir en solitario y plantear el 9-J como una primera vuelta de las autonómicas y una ocasión de oro para batir a ERC, que sí tiene previsto presentarse en coalición con EHBildu.

Los jeltzales están convencidos de que el carácter «plebiscitario» que Junts busca imprimir a las próximas citas electorales desaconseja recuperar una alianza vigente desde 2004 que se rompió hace cinco años tras purgar Puigdemont al sector moderado del PDeCAT. El PNV evitó entonces escenificar un divorcio abrupto –incluso firmaron un acuerdo de colaboración postelectoral– pero lo cierto es que las relaciones habían quedado muy dañadas tras el 'procés'. Ahora, el acercamiento a Puigdemont ha tenido más que ver con el interés en armar una mayoría suficiente en torno al Gobierno de Sánchez que con una coincidencia real en los tiempos y en los ritmos políticos de sus respectivos proyectos.

Así las cosas, Sabin Etxea da prioridad absoluta a cerrar un acuerdo de cara al 9-J con Coalición Canaria, que está en la mayoría de la investidura pero se ha opuesto firmemente a la amnistía a los líderes del 'procés' a diferencia del PNV, que insiste en la importancia de que la ley, más que nunca en el alero, prospere. Aun así, la alianza con los nacionalistas canarios, a la que podrían sumarse después otras pequeñas formaciones de Galicia, Valencia y Baleares, permitirá al PNVcentrarse en un discurso netamente europeísta volcado en incrementar el papel decisorio de las regiones en la UE. «Han sido unos socios leales en los últimos años y estamos en una longitud de onda similar en lo que necesitamos de Europa», abundan en el EBB.