Rosas rojas para no olvidar

Era un jubilado de 69 años, el único concejal socialista de la localidad. Asturiano de origen, de la cuencas mineras hasta la médula, y afiliado toda su vida del Partido Socialista y de la UGT, Priede vivía en Orio después de haber enviudado y trasladarse a residir al domicilio de su hija. Era un hombre discreto en su compromiso político pero que había entregado todo a su organización. Humilde pero muy entregado al pueblo, siempre dispuesto a ayudar a la gente, como le recordó en su día Iñaki Arriola. Sabía del peligro que asumía pero ejerció el compromiso con valentía. Fue asesinado por unos pistoleros de ETA, que incluso le remataron en el suelo con un tiro de gracia. Apenas había gente en el establecimiento y él, que estaba frente a la barra y de espaldas a la puerta, ni siquiera pudo darse la vuelta para ver a los terroristas cuando entraron en el local al grito de 'todos al suelo'.

José Ignacio Asensio, secretario general del PSE de Gipuzkoa y primer teniente de diputado general de Gipuzkoa, reivindicó este domingo a mediodía en un acto celebrado en el cementerio de Orio el compromiso de Juan por la libertad y la democracia de Euskadi. Priede, junto a Froilán Elespe e Isaías Carrasco, es de esos nombres de representantes de la voluntad popular que la historia ha agigantado en el socialismo guipuzcoano y ha esculpido un relieve bien traumático. «Son los imprescindibles, los grandes».

Las palabras de Asensio retumban esta gris mañana de la temprana primavera como un alegato contra la amnesia y contra el olvido. La memoria, aseguró, es la pieza necesaria para construir el futuro. «No podemos olvidar». Junto a él, la hija de Juan, Ana, que es directora de Cooperación de la Diputación de Gipuzkoa; los consejeros socialistas del Gobierno Vasco, Denis Itxaso, de Vivienda y Agenda Urbana, y María Jesús San José, de Justicia y Derechos Humanos, y el secretario de Organización del PSE, Miguel Ángel Morales, junto a un grupo de militantes socialistas. Flota en el ambiente un aire de tristeza pero a la vez de dignidad exigente.

El secretario general de los socialistas guipuzcoanos defendió en el acto una memoria comprometida con la verdad «sin las manipulaciones que caracterizan a la derecha y ultraderecha, para tratar de desprestigiar la victoria democrática frente a ETA. Porque son ellos, los de la derecha y la ultraderecha, los que se llenan la boca hablando de libertad y derechos humanos».

Los socialistas de Gipuzkoa rendían así un reconocimiento a Priede en un acto sencillo y emotivo. Esta vez faltó el canto de 'La Internacional' que el mismo Priede entonó con lágrimas en los ojos días antes de morir asesinado en el homenaje a Froilán Elespe, primer teniente de alcalde de Lasarte-Oria y que fue víctima también de un atentado terrorista un año antes.

Fue una época terrible, recordó Asensio, que las nuevas generaciones deben conocer y el conjunto de la ciudadanía no debe olvidar. Entre otras razones «porque parte de la sociedad miraba para otro lado» y para que ese siniestro pasado nunca más vuelva a repetirse. Asensio pidió «a la derecha y a la ultraderecha que se miren en el espejo de Priede. Un compañero que sabía que solo con libertad y derechos podemos construir un futuro justo y digno para todos». En la actualidad, el PSE no tiene representación en el Ayuntamiento de Orio, con una alcaldía en manos de EH Bildu. La coalición soberanista cuenta con diez ediles y el PNV con tres corporativos.