750 años de Villafranca, «un lugar de encuentro»

En la dedicatoria que este sábado ha rubricado el lehendakari, Iñigo Urkullu, en el libro de honor de Ordizia que encabezaba con una referencia a 'Erdizia, ORDIZIA', y en la que se ha referido a la humildad y grandeza del municipio como señas de identidad, el máximo mandatario ya finalizado su cita expresando su reconocimiento, agradecimiento y felicitando a los ordiziarras en nombre de toda la ciudadanía de Euskadi.

Prácticamente coincidiendo con el día de la fecha, la localidad del Goierri ha asistido este sábado a la celebración del 750 aniversario de la concesión de carta puebla que el 30 de julio de 1268 rubricó en Sevilla el Rey Alfonso X El Sabio por la que aquel lugar que llamaban Ordizia pasaba a denominarse Villafranca y y se le concedía el fuero de Vitoria. Carta puebla original, custodiada a cerrojo en el archivo municipal que este sábado ha ocupado un lugar destacado en el salón de plenos, donde ha tenido lugar el acto institucional, sala en la que de manera permanente se exhibe una copia del documento.

Desde comienzo de año, Ordizia viene llevando a cabo una amplísima agenda de actividades que concluirán con el propio ejercicio.

Año entero de celebración que no obstante reservaba una fecha próxima a la del 30 de julio para asistir al acto central e institucional de tan longevo aniversario, que ha llevado a cabo este sábado apadrinada por una amplia representación institucional encabeza por el lehendakari, Iñigo Urkullu al que han acompañado el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano; la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; la presidenta de las Juntas de Gipuzkoa, Eider Mendoza; la consejera de Desarrollo Económico del Gobierno Vasco, Arantza Tapia; el consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria; la rectora de la UPV, Nekane Balluerka; y alcaldes de varias localidades guipuzcoanas, entre ellos la alcaldesa de Bergara, Elena Lete, localidad que a su vez comparte cumpleaños.

Junto a la amplia representación institucional han estado presentes 61 exmiembros de la corporación, alcaldes y concejales que han formado parte del consistorio municipal ordiziarra durante estas cuatro últimas décadas.

El alcalde de Ordizia ha ejercido de anfitrión y como manda el protocolo, a pie de calle le ha entregado al lehendakari el bastón de mando, sequito que ha subido al salón de plenos a los sones del 'Alkate soinua'.

En su disertación el máximo edil municipal ha expuesto que en aquel 1268 «comenzó una nueva andadura que reforzó el carácter de la ahora Villafranca, un lugar de encuentro, de paso en el tránsito entre Irun y Castilla, para mercaderes, soldados y todo tipo de transeúntes», ha remarcado.

El alcalde no se ha olvidado de aquel incendio que en 1512, arrasó la villa, tras el que la reina Juana de Castilla, otorgó al municipio como forma de hacer frente a aquella catástrofe el privilegio por el que celebrar mercado semanal, los miércoles, «seña de identidad que mantenemos y deseamos relanzar» ha apuntado.

El diputado General, Markel Olano ha hecho alusión a los 89 municipios que conforman Gipuzkoa, «corazón, motor y alma de la provincia», ha destacado. Y entre ellos Ordizia, que junto a aquellas villas que surgieron en aquel contexto cooperaron y sentaron las bases para el desarrollo del territorio histórico. «Así fue hace 750 años y así es ahora. Afianzar y reforzar ese proyecto colectivo que es Gipuzkoa reclama, cooperación, imaginación y esfuerzo», ha subrayado.

El lehendakari Iñigo Urkullu ha puesto el énfasis de salida en la importancia del mercado ordiziarra , que mantiene vivo el sector agropecuario local (kilómetro cero), además de convertirse en plaza como lugar de encuentro y convivencia. Localidad industrial, ha indicado, ligada a sus orígenes. Proceso y evolución unidos a la colaboración, la tecnología, la calidad, la innovación y, ahora, a la industria 4.0.

«Siempre habéis sido pioneros y capaces de crear, pequeñas, medianas y grandes empresas con vocación internacional, siguiendo los pasos de Andrés de Urdaneta», ha subrayado

Una localidad, potente en el ámbito de la educación, la cultura, el euskera, la música y el deporte, es decir eficaz en el sector terciario. «Un pueblo vivo, trabajador, pionero, asentado en sólidos valores, abierto al mundo, que cree en la cultura y en la colaboración, que consolidan sus señas de identidad», ha afirmado Urkullu.