Las consecuencias de la salida de Roberto Olabe

La salida de Roberto Olabe de la Real Sociedad supone todo un terremoto en el club, toda vez que el máximo responsable del área deportiva lleva las riendas del proyecto desde 2018 y ha moldeado el club con sus propias manos. Nunca antes ha habido una persona con tanto peso en la toma de decisiones en lo deportivo, mientras que la profunda transformación que viene sufriendo Zubieta durante los últimos años también van con su firma.

La Real debe encontrar en el mercado, salvo que apueste por el talento de casa como ocurre también sobre el césped, un líder con la experiencia y la capacidad del gasteiztarra, empresa francamente complicada a la vista de los resultados conseguidos con Olabe al mando de las operaciones. La salida del gasteiztarra coincide con la futura renovación de Imanol, que si bien continúa manifestando que «todavía me lo tengo que ganar» su cointinuidad parece garantizada. Jokin Aperribay ha desvelado en comparecencias recientes que el oriotarra le ha transmitido que quiere renovar, una situación pendiente del calendario. Quién sabe si en estos días de parón se adelantan los acontecimientos.

Una de las principales áreas de actuación son los fichajes. Quizás se puede entender como algo lógico en cualquier director de fútbol de otros clubes, pero Olabe tiene un peso fundamental en la toma de decisiones y no tanto el entrenador como así ocurre en otros clubes. Por poner un ejemplo cercano. Imanol pidió por activa y por pasiva la contratación de Alexander Sorloth, tanto que públicamente llegó a verbalizar que era su delantero, y sin embargo la dirección deportiva se decantó por no contratar al noruego por el alto coste que acarreaba su llegada.

De su mano también nació la famosa área de reclutamiento, que está por ver cómo se rediseña si es que sufre alguna modificación. El área es tan amplia y hay tantos trabajadores en Zubieta que todavía resulta imposible detallar los posibles cambios en una estructura tan grande y tan voluble como Zubieta. Está por ver qué sucede también con Erik Bretos, su mano derecha desde hace años y responsable del área de reclutamiento. Su designación como un hipotético director de fútbol sería una decisión continuista del club, aunque todavía no hay una decisión tomada al respecto puesto que el Consejo de Administración se tiene que reunir nuevamente para evaluar la situación.

Roberto Olabe abandona la Real por tercera vez, después de que fuese sustituido del cargo en el verano de 2005 cuando Fuentes gana las elecciones y él era afín a Astiazaran. Un año antes, en 2004, el gasteiztarra creó la sección femenina del club, que veinte años después sigue dando alegrías a la afición. Garbiñe Etxeberria está al mando del proyecto deportivo femenino, aunque Olabe también trabaja en la sección. Con él a los mandos se ganó el primer título

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