«Corazón, sí; cabeza y piernas, también»

No existe precedente esta temporada entre merengues y realistas puesto que el choque que se debía haber disputado el 24 de noviembre tuvo que ser suspendido por el temporal de viento que asoló el territorio guipuzcoano y no hay todavía fecha asignada para su disputa. Es decir, los datos para comparar ambos equipos son puramente estadísticos: el Madrid es segundo en liga, aventaja a la Real en ocho puntos y solo ha perdido dos encuentros -contra el Barça y la semana pasada ante el Eibar- y empató el choque ante el Atlético.

El entrenador realista no cree que el triunfo armero el fin de semana pasado pueda indicar el camino para sus pupilas, ya que «la Real es diferente, va a ser un partido distinto, los caminos van a ser otros y veremos cómo estamos para intentar ir a la final». No oculta que el favorito para acceder a la final es el cuadro merengue pero «tenemos claro que estamos ahí para 'molestar' y demostrar que si el Madrid se equivoca, podemos hacerles daño».

En el cuadro merengue, la escocesa y máxima asistente, Caroline Weir, es duda, mientras que la francesa Lakrar ha tenido un golpe, aunque parece que llegará. Su máxima goleadora es la danesa Bruun.

La capitana de la Real, Nerea Eizagirre, también compareció para ofrecer su testimonio acerca de la semifinal ante las blancas. Preguntada por si el cuadro realista debe jugar con el corazón para paliar el favoritismo del Madrid dijo que «sí. Pero también con cabeza y piernas». Es decir, la Real también tendrá que proponer algo para hacer daño al Real Madrid. Será sin Vanegas, su referente en la zaga, ni Lavogez, ambas lesionadas de larga duración.

La capitana siente que el equipo está preparado para rendir muy bien aunque tenga enfrente al segundo de la Liga F. «Desde que ha llegado José competimos mejor, entendemos qué tenemos que hacer cuando están en el campo», comentó Eizagirre. «Si planteamos bien el partido, podemos estar cerca, no hacernos pequeñitas», como ha sucedido en otras citas de este tipo «y creérnoslo, intentar ser un equipo grande. Si el Madrid es grande, nosotras también».

La tolosarra tendrá la función de llevar el peligro al ataque blanquiazul, junto con Amaiur y Franssi. No será tarea sencilla batir la meta de Chavas, ya que tan solo ha encajado doce goles en todo el campeonato liguero. El corazón, la cabeza y las piernas son la distancia que separan a la Real de una nueva final.