Rupérez, hombre del partido ayer, celebra el golazo que supuso el 1-0. RS
Real Sociedad

Los herederos ya conocen su casa

Todos los potrillos menos Eder García, el artífice del triunfo, jugaron ayer por primera vez en Anoeta, estadioen el que sueñan con hacerlo conel primer equipo

Lunes, 23 de diciembre 2024, 07:33

Zubieta es el camino, pero Anoeta el destino. Las instalaciones de la ciudad deportiva son un lujo a la altura de unos pocos, pero las vibras que siente el futbolista en el coliseo realista son inalcanzables. Todos los jugadores que entran en la academia de ... la Real tienen el objetivo de vestirse de azul y blanco en el estadio de Amara. Todos los caminos conducen a ello, aunque sea un porcentaje muy mínimo el que puede decir luego que ha completado el proceso.

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Los jugadores del Sanse acudieron ayer a Anoeta desorientados. Acostumbrados, la mayoría de ellos, a verlo desde la perspectiva de la grada, descubrieron que desde el verde impone más. Todos menos Eder García, que jugó ante el Real Unión en febrero del año pasado, eran nuevos en el asunto. Alguno más había tenido la oportunidad de estar en el banquillo, pero nunca en el rectángulo de juego. Las primeras veces siempre son especiales.

Quienes tuvieron la oportunidad de ver el partido ante el Ourense confirmaron que el futuro de su equipo está en buenas manos y que hay jugadores en el Sanse que volverán a jugar en Anoeta, tarde o temprano. Quizás en algún partido importante de este curso con el filial para el que el club decida abrir el estadio. Tal vez el año que viene tras un hipotético ascenso a Segunda División. Pero seguro que lo harán en el futuro siendo jugadores del primer equipo de la Real.

Como sucede en todas las generaciones del Sanse, hay jugadores más cerca del primer equipo que otros. Mariezkurrena, Goti, Beitia, Rupérez y Balda debutaron en Alicante en el partido de Copa ante el Jove. Fraga y Marchal también han estado en convocatorias, aunque Imanol de momento no les haya encontrado hueco para hacerles debutar. El foco del realista estaba ayer sobre ellos.

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Rupérez brilla

Iñaki Rupérez sobresalió por encima del resto en su estreno en el estadio de la Real. En todos los amistosos de verano y en los cinco minutos que jugó en el Rico Pérez con el primer equipo el navarro lo hizo de central. Pero ayer demostró, una vez más, que es un fenomenal lateral derecho. La imponente irrupción de Aramburu ha evitado que entre la afición txuri-urdin se le conociese ya como 'El expreso de Ansoain', en honor al también navarro Carlos Martínez. Primero recibió de Dani Diaz, recortó y fusiló la portería defendida por Marqueta. Después, en el minuto 93, cuando las pìernas le tiemblan a la mayoría, realizó un cambio de orientación que originó el 2-1 de la victoria. Es un lateral ofensivo, aunque aplicado defensivamente, con potencial para generar diez goles por temporada.

Menos brillante estuvo Goti, el único integrante que presume de haber metido un gol con el primer equipo de la Real. Falló un penalti que pudo suponer el 2-0 y cometió el que acabó poniendo el 1-1 en el marcador. Es el máximo goleador del Sanse con cinco dianas, pero no estuvo a su nivel habitual. Dejó varios gestos que evidencian su talento, eso sí, como los dos caños en la parte final de la segunda parte. Es el jugador más hecho del filial de la Real, aunque la feroz competencia en su posición de interior ofensivo del primer equipo le restan oportunidades de asentarse.

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Jon Balda, recientemente renovado hasta 2027, tiene un futuro prometedor como lateral izquierdo. Ha sufrido duras lesiones que le han restado velocidad y chispa, pero el cambio de posición del extremo al lateral le ha sentado bien. Contra el Ourense demostró su calidad en el golpeo y su ida y vuelta por la banda izquierda. El fichaje de Javi López y el rendimiento de Aihen le cierran la puerta por el momento, por lo que una cesión la temporada que viene podría ser ideal.

Los niños maravilla

Álex Marchal (2007) y Dani Díaz (2006) son las grandes esperanzas para los extremos del futuro en la Real. El navarro ya ha encandilado a Imanol en algún entrenamiento y su debut es cuestión de tiempo. Le bastaron diez minutos en el campo para dar su primera asistencia en Anoeta. El cántabro vio frenada su progresión por la grave lesión de rodilla y en su primer día en Anoeta fue sustituido al descanso tras un partido gris, pese a la asistencia del 1-0. El futuro es brillante, solo queda esperar, confiar y apostar.

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