Osasuna-Real Sociedad

Primer capítulo: El Sadar en Liga

La Real cogió aire el jueves ante el PAOK en Europa League, hizo los deberes en casa, y ahora le toca poner fin a su racha negativa en la competición doméstica. La afición txuri-urdin se las prometía muy felices hace tres semanas después de vencer al Villarreal en el Reale Arena, pero las dos últimas derrotas ante el Valencia y el Getafe han interrumpido la progresión que estaba experimentando el equipo hacia posiciones europeas.

El cuadro blanquiazul se colocó a dos puntos del conjunto castellonense tras aquel triunfo, ocupando la séptima posición. Dos jornadas después ha sido superado en la tabla por Girona y Rayo y el equipo que dirige Marcelino se ha escapado a nueve puntos de distancia. Europa demanda regularidad.

Ha atravesado momentos de inspiración a lo largo de la temporada, pero aún no ha conseguido enlazar tres victorias consecutivas en Liga, ni siquiera encadenar cuatro encuentros sin derrotas. Está siendo un equipo de picos, no demasiados elevados ni profundos, pero lo suficientemente significativos para que a estas alturas de campeonato esté fuera de la zona europea.

Para poder optar nuevamente a entrar en ella no queda otra que ganar esta tarde en El Sadar. En un escenario y ante un rival al que el equipo de Imanol le había cogido la medida en el último lustro, pero que últimamente se le ha atragantado. El feudo rojillo exige máxima concentración. Ser ganador en las disputas. Hará falta algo más que fútbol para traer los tres puntos de Pamplona.

El técnico oriotarra tan solo cuenta con una baja con respecto a la última convocatoria. Se cae Odriozola, que sufrió un fuerte golpe en la costilla el jueves contra el PAOK en Europa League y no entra en la lista. Tampoco aparece Hamari Traoré, que continúa con su proceso de recuperación de la rotura de cruzado que sufrió en septiembre, ya integrado en la dinámica de grupo.

Quien sí figura en la relación de jugadores que viajan a Pamplona es Aihen Muñoz. El lateral de Etxauri se ha restablecido con rapidez de las molestias que arrastraba en el glúteo desde la última jornada y su regreso alivia la situación en la posición del lateral izquierdo. Sergio Gómez fue el escogido para jugar ante el conjunto griego, después de que Javi López quedara señalado en los goles del Getafe hace una semana.

El técnico oriotarra volverá a modificar esta tarde el once inicial tras la masiva rotación que realizó el jueves en la que no se salvó ni Remiro. El guardameta de Cascante regresará a la portería después de la convincente actuación de Marrero frente a los griegos y estará custodiado por una línea defensiva compuesta por Aramburu, Zubeldia, Aguerd y Aihen. Zubimendi, Sucic y Olasagasti podrían formar el centro del campo y Kubo, Oyarzabal y Sergio Gómez se repartirían las tres posiciones del ataque. La Real podría presentar así un once competitivo, a la vez que descansado, en cada una de sus líneas.

Imanol se guardaría así dinamita en el banquillo con el bigoleador Óskarsson, el asistente Becker y Barrenetxea. Hoy podría darse por fin el estreno de Zakharyan, fuera de juego desde julio. El ruso llevo a cabo ejercicios de calentamiento en la banda el jueves durante el segundo periodo y está cada vez mas cerca de volver a jugar.

Enfrente estará Osasuna de Vicente Moreno, que recupera a Bryan Zaragoza, tras permanecer de baja por lesión desde la primera semana de diciembre. El malagueño, que fue una auténtica pesadilla para la zaga guipuzcoana en el partido de la primera vuelta del Reale Arena que se saldó con victoria visitante, volverá a ser una amenaza, pero todo apunta a que arrancará el partido desde el banquillo.

El técnico valenciano también podrá contar con Moi Gómez, ausente en la pasada jornada, y volverá a echar mano de Budimir y Aimar Oroz como principales referencias ofensivas. Hoy no se habla de la Copa en El Sadar, solo importa la Liga para poder seguir mirando a Europa.