La Real asoma en Europa

Fue un subidón como el que vivimos en el Wanda hace medio año, porque cerraba una gran actuación en un gran escenario. Y el gol era más que merecido.

Hoy volveré a ver el partido con menos pulsaciones, porque me quiero recrear especialmente con la primera media hora que hicieron los nuestros en el Diego Armando Maradona. Fue algo tremendo. Desde el primer segundo los chavales de Imanol salieron a comerse al rival en busca de un triunfo necesario. Ojo, que no estaba la bandera del equipo, Mikel Oyarzabal, -me hubiera encantado verle celebrar el gol de Willian- y tampoco estaba David Silva. Pero es que, como dijo Imanol el miércoles, da igual, ¡somos la Real Sociedad!, la auténtica sensación de la temporada, en la que lleva solo dos derrotas en dieciocho partidos. Y eso no es por casualidad.

Ayer le tocó, además, lidiar con lo peor que hay en el fútbol, que es la ansiedad, las ganas de llegar al gol de cualquier manera, pero hasta eso hicieron bien los nuestros, porque lejos de dejarse llevar por el corazón, siguieron hasta el final, hasta alcanzar ese golazo de Willian José. Luego vino la victoria de Rijeka, que no hizo sino confirmar la dureza del grupo en el que estaba nuestro equipo, pero de verdad que no es lo mismo clasificarse empatando en este gran escenario del fútbol europeo, que perdiendo.

De verdad que aún en la derrota, hubiera estado igual de orgulloso de este equipo que siempre juega a ganar. No lo puede hacer todos los días, pero sí lo está haciendo muy a menudo, por mucho que los últimos cinco partidos se cuenten por empates.

Y es que lo de ayer fue un empate en el marcador, que de facto hay que considerar como una gran victoria, que encumbra todavía un poco más a este grupo tan fuerte y convencido que forma el vestuario de nuestra querida Real Sociedad.

No me olvido, porque sería injusto hacerlo de Portu. Claro que todos saltamos del sillón cuando, con la portería vacía para hacer el 0-1, remató fuera. Son cosas que pasan. Es fútbol. Y Portu sabe mucho de este deporte. Seguro que celebró con un poco más de entusiasmo el gol de Willian. Pero es que son todos. ¡Vaya recital de Merino! ¡Vaya partido y esfuerzo de Januzaj!

De verdad. Aprovechen y disfruten que el fútbol está de enhorabuena con esta gran Real Sociedad.