Ocasión para meter 6 puntos a Europa

Ahora mismo el Villarreal es el séptimo, primer equipo que se queda fuera de Europa a expensas de lo que suceda en la final de Copa. El submarino amarillo tiene 45 puntos y la Real, pendiente del encuentro de hoy, 48. Si gana le metería seis puntos, una ventaja más que apreciable en la recta final del campeonato.

Imanol no podrá contar por lesión con Carlos Fernández, Monreal, Barrenetxea ni Oyarzabal, mientras que pierde por sanción a Januzaj, una baja importante teniendo en cuenta las ausencias que registra la línea delantera. Los potrillos Naïs Djouahra y Ander Martín tratarán de echar una mano en las posiciones de arriba como vienen haciendo en las últimas semanas.

La vuelta de Aihen representa la buena noticia en la convocatoria después de más de un mes alejado de los terrenos por una lesión muscular en el sóleo que se produjo después del partido de vuelta ante el Leipzig. En cualquier caso parece que Diego Rico se mantendrá en el once después de hacer un buen partido la jornada anterior en el Pizjuán.

Fortaleza en el Reale Arena. La clave para clasificarse por tercer año consecutivo para Europa estará en los partidos de casa, donde la Real tiene que dar continuidad a la fortaleza que ha demostrado en este 2022 en Liga. De los cinco encuentros que ha disputado en el Reale Arena desde enero ha ganado cuatro y empatado uno, 13 puntos de 15 que le mantienen sexto en la tabla.

Sus víctimas propiciatorias han sido el Celta (1-0), Granada (2-0), Osasuna (1-0) y Alavés (1-0), mientras que solo el Getafe (0-0) ha salido vivo de Donostia, no sin sufrir un disparo de Isak a la cruceta en el descuento. Ahora mismo solo los cuatro primeros y el Villarreal mejoran las cifras del conjunto de Imanol como local, lo que demuestra que para volar alto hay que hacerlo bien en casa.

Estas victorias se han labrado desde el esfuerzo y el rigor defensivo, ya que no es casualidad que en estos cinco partidos no haya encajado ningún gol. El último que ha recibido la Real en casa en Liga se remonta a hace tres meses y medio, al 18 de diciembre, cuando Chukwueze sentenció en la prolongación aquel partido para el Villarreal (1-3).

Desde entonces, y a falta de goles que permitan triunfos más amplios, el conjunto txuri-urdin ha apelado al orden y a un buen trabajo sin balón para ser competitivo. Hoy tendrá una nueva prueba de fuego tras la lesión de Oyarzabal y la ausencia en ataque de Januzaj por sanción.

El Espanyol flojea fuera. El equipo de Vicente Moreno es un conjunto proactivo construido desde el buen gusto por el balón que, en su regreso a Primera, está sufriendo fuera de casa. En Cornellà, arropado por su gente, se encuentra respaldado para llevar adelante una propuesta atractiva con la que ha conseguido ganar al Real Madrid y empatar ante rivales como el Barcelona, Sevilla y Villarreal. El 77% de los puntos que ha sumado hasta ahora los ha logrado como local, lo que a su vez deja entrever que como visitante su nivel baja bastante.

De hecho, es uno de los equipos más flojos en los desplazamientos, con solo ocho puntos logrados en 14 salidas (0,57 por encuentro). Únicamente los dos últimos, Levante y Alavés, junto con el Getafe y el Rayo Vallecano presentan peores números. La única victoria que tiene lejos de su feudo la consiguió el 31 de diciembre en Mestalla (1-2) con goles de Raúl de Tomás, hoy baja, y Puado en los últimos minutos aprovechando que el Valencia se había quedado con diez. Luego ha rascado cinco empates en los campos de Osasuna, Betis, Elche, Cádiz y Levante, y ha mordido el polvo en ocho visitas, aunque solo en una ha salido goleado, en Villarreal (5-1) hace un mes.

Con De Tomás fuera de combate por lesión, su gran referente es Sergi Darder, uno de los centrocampistas más en forma del campeonato. También tiene dos laterales jóvenes de proyección como Óscar Gil y Pedrosa a los que les gusta subir en ataque y genera bastante peligro en las acciones a balón parado con las incorporaciones de Cabrera, Yangel Herrera y Puado al remate.