¿Sancionarías a Theo?

Adulada por todos (por mí, el primero), la Real sufrió una dura derrota. Digo dura porque una Real que, pese a perder, venía de haber jugado francamente bien en el Villamarín y que había pasado de ronda copera ante el Celta, dio la de arena frente a un Valladolid que no es precisamente el Bayern, aunque convendrán conmigo que hizo muy bien los deberes. Esta vez el reflejo fue mejor que el espejo, para unos porque el Valladolid dio descanso a nueve jugadores en la Copa; para otros porque Asier Garitano se encontró con la horma de su zapato, un Valladolid que le jugó como la Real había jugado al Athletic o al Levante por poner dos ejemplos. Y es que los pucelanos dominaron los asuntos básicos del contragolpe, eso sí, ayudados por dos monumentales errores defensivos de la Real (los tantos encajados fueron de broma). Basta con que repasen el vídeo. En el primero, a un mal despeje de Theo se suma un resbalón de un desconocido Illarramendi..., y en el segundo Theo se queda como un pasmarote, Moyá sale no se sabe a qué (y adiós muy buenas, 0-2).

Remontar dos goles no es fácil pero la Real estuvo en un tris, aunque fue un acoso sin derribo, como he leído. También he leído que la Real dobló en posesión de balón al Valladolid, le dobló también en número de córners y en remates, pero el marcador no se movió del 1-2, cara de tontos... y a casa.

¿Nombres propios? Moyá hizo dos paradas de mérito pero cantó la Traviata en el segundo gol (error imperdonable).

Y Theo estuvo fatal. Su fuerte nunca han sido las labores defensivas pero existen unos mínimos que Theo no cumple y al jugador habría que llamarle a capítulo. Y no solo en el plano deportivo sino porque volvió a hacer de las suyas en aquel desplante cuando fue sustituido (y la gente se pregunta y te pregunta si le sancionarías).

Asier Garitano quitó importancia al tema..., aunque no llegó a lo que hizo Ancelotti cuando entrenaba al Bayern. El técnico italiano, un entrenador sosegado y sereno donde los haya, sustituyó a Ribery por Douglas Costa en un partido contra el Borussia Dortmund. Ni corto ni perezoso, Ribery se fue airado a por su entrenador, a quien reprochó su sustitución haciendo gestos con la mano. Ancelotti, sin inmutarse lo más mínimo, le tomó la cara, le dio un beso en la mejilla y le abrazó. Un gesto que calmó los ánimos de Ribery, que cambió su ira por una sonrisa...

Illarramendi estuvo de nuevo mal (Asier, algún día nos contarás qué te pasa)... y Mikel Merino, (sustituto de un Zurutuza a quien se echa en falta cuando está bien porque hace mejores a los que están a su lado), estuvo fatal, en otra actuación decepcionante del jugador llamado a llevar las riendas del equipo. Mikel Merino se presentó en Anoeta como el fichaje de verano, un fichaje de relumbrón, pero por fas o nefás no ha ofrecido nada, salvo un par de pinceladas..., muy poco para un futbolista cuyo traspaso costó doce millones de euros.

P.D. El fichaje de Merino ha sido el tercero más caro en la historia de la Real. Stop. Y Willian José volvió a fallar dos goles, uno de ellos 'cantado'. Recibe pocos balones, es cierto, pero los que le llegan no entran. Stop. Lleva anotados tres goles en Liga y son pocos para alguien al que tanto elogiamos la temporada pasada. Stop. Por cierto, un exconsejero realista, generalmente bien informado, me dijo ayer que el próximo verano, Willian recalará en la Premier. Stop. Así que habrá que estar atentos. Stop.