La tripulación de Hondarribia llevaba desde 2015 sin ganar en casa y el pasado domingo consiguió volver a triunfar en sus aguas. Beñat Egiazu (Hondarribia, 1994) ha remado en estas dos victorias locales y para el remero hondarribiarra «es una felicidad especial» ondear su bandera.
– La del domingo fue una victoria importante para su equipo, ¿verdad?
– Estamos muy contentos. Más que la victoria fueron las sensaciones, que fueron muy buenas. En las últimas semanas hemos remado muy a gusto y los resultados han sido buenos. Con el nivel que hay este año, cuando te vienes un poco abajo entran traineras por delante, pero siempre hemos estado cerca, a pocos segundos de las banderas. Las sensaciones en verano han sido buenas y el domingo lo confirmamos.
– ¿Tenían una espina clavada por estar seis años sin ganar en Hondarribia en liga?
– En estos seis años hemos conseguido otras victorias importantes, pero la de casa en liga nos estaba costando. Cuando juegas en casa al final es un día puntual y todas las piezas del puzzle tienen que encajar: que tengas buen día, que los otros equipos no, que las calles no te jueguen en contra... Nos ha costado y teníamos muchas ganas de ganarla por fin.
– Al terminar la regata se les veía muy contentos y aliviados.
– Había mucha gente que no había ganado la regata de casa. En 2015 fue la última y desde entonces ha habido cambios en el equipo. Sí que podíamos tener esa espina metida. Teníamos mucha ilusión por conseguir esta victoria.
– Para usted, como hondarribiarra, fue una bonita victoria, ¿no?
– Es una felicidad especial. Es una regata más de la liga, pero para nosotros es singular porque es más fácil compartirlo con los de casa. El espigón no estaba lleno como en 2015 y el recuerdo de aquello fue increíble, quizás también porque fue mi primera victoria en casa. Pero ganar en Hondarribia te da la oportunidad de compartirlo con tu afición y el ambiente que se vive en el pueblo es muy especial.
– Esta vez no tuvieron el espigón a rebosar.
– Desde el pasado año sabemos qué situación tenemos. Te da pena, pero mejor tener esa pena que no ganar la regata. El pasado año, al ganar la Bandera de La Concha, también nos dio pena no celebrarlo con la afición como es debido, pero al menos tenemos esas victorias en el bolsillo. Es mejor ganar y quedarse con la pena que vivirlo al revés.
– ¿Qué diferencia ve entre la victoria de 2015 y la del domingo?
– El equipo ha cambiado. En 2015 fue un muy buen año, conseguimos trece victorias y el bote era muy potente. Teníamos buenos remeros y hemos ido cambiando estos años. Han entrado jóvenes y remeros de fuera, que también son necesarios. A pesar de los cambios, en estos seis años el nivel no ha bajado. Todo es mérito del club, porque van saliendo remeros de la cantera. La filosofía no ha cambiado, porque salimos a las regatas a hacer lo que entrenamos. El modo de trabajar y la mentalidad no han variado.
– En lo deportivo, ¿cómo vivieron la regata?
– Desde el calentamiento vimos que íbamos bien. Sí que es verdad que tuvimos un punto de nerviosismo al ver que en la primera y segunda tanda terminaban por la calle cuatro y que el equipo más fuerte de la liga iba por la cuatro. Ahí vimos la situación un poco más negra. Pero en el primer largo fuimos bien y eso nos confirmó lo vivido en el calentamiento y en las últimas semanas, que el bote va bien y rápido tanto para afuera como para adentro. Disfrutamos de la regata y al ver que las diferencias se ampliaban nos centramos en nuestra remada sin olvidar que Orio hizo buen tiempo.
– Hicieron buena la calle dos cuando a priori no era la deseada...
– Nunca sabes al 100% cuál es la calle buena y cuál la mala. Fue la calle que nos tocó y ahora no la cambiaríamos. No podemos perder energía en pensar qué calle nos va a tocar. Sí que es verdad que con la igualdad que hay sí que afectan las diferencias de calles. Esperemos que al menos no tengamos mala suerte en Galicia.
– El sábado en Ondarroa consiguieron el tercer puesto desde una calle que tampoco parecía la mejor. ¿El buen trabajo os motivó aún más de cara a la regata de casa?
– En las últimas semanas hemos hecho muy buenas regatas a pesar de que no en todas hayamos conseguido la bandera. El sábado estuvimos a siete segundos de Zierbena, pero el equipo dio muy buen nivel. Parte de la victoria del domingo fue gracias a las sensaciones del sábado, porque nos quedamos a gusto con el trabajo realizado y nos dio ánimos para la regata de casa.
– En un solo fin de semana han quitado cuatro puntos a Santur-tzi. ¿Esto da más valor a lo realizado en las dos jornadas?
– Esta semana nos quitaron el punto de la segunda jornada de A Coruña y empezamos a ocho puntos, pero en nuestra cabeza no pensamos si estamos a ocho, a cuatro o a dos puntos. En la próxima semana iremos a por los doce puntos, no para recortar, sino porque nos gusta ganar banderas y porque entrenamos para ello. Ahora estamos más cerca, pero nuestra mentalidad será la misma que la de hace una, dos y tres semanas. Intentaremos ir a por los doce puntos y luego veremos dónde estamos.
– ¿Ahora ven que están más cerca de esa remontada?
– Los números dicen que estamos más cerca, pero nosotros no cambiamos. Disputaremos veinte regatas en todo el verano y terminaremos donde nos merecemos terminar. Lo intentaremos y el hecho de estar más cerca hace que estés más enchufado, pero nuestro aliciente son las banderas y buscaremos pescar alguna en Galicia. Si lo conseguimos nos ayudará para terminar mejor en la liga.