Zierbena se empadrona en Galicia y la Liga arde

Zierbena ha decidido empadronarse en Galicia. Dónde va a vivir mejor. Seguramente la idea no haga ninguna gracia en Boiro, donde este domingo celebraron la victoria de Cabo da Cruz en la segunda tanda, donde soñaron con poder ondear la tercera bandera de su historia en la competición y donde finalmente se quedaron con la miel en los labios tras el fantástico último largo protagonizado por los galipos, que arriesgaron al optar por mantener su rumbo por la calle 4 y no cruzar el campo de regateo y metieron seis segundos a Hondarribia, siete a Urdaibai, 12 a Cabo y 18 a Orio para ganar la bandera.

La corriente, y en menor medida el viento, mediatizaron el desarrollo de la tanda de honor. En el primer largo Orio, que había sido primera en las tres ciabogas de la segunda tanda, mejoraba el registro de Zierbena en nueve segundos, en diez el de Hondarribia, en doce el de Donostiarra y en trece el de Urdaibai. La subida de la fuerza de la corriente era evidente porque el viento era prácticamente inexistente, de entre tres y cuatro kilómetros a la hora.

Pero si la corriente frenaba a las embarcaciones de brankas, en popare las impulsaba con mayor fuerza, lo que hizo que Zierbena, que cambió a cuatro remeros y al patrón, marcara el mejor tiempo mediada la prueba, con Hondarribia y Orio a dos segundos, Cabo da Cruz a cinco, Urdaibai a seis y Donostiarra a siete.

En esos últimos metros del segundo largo el viento había comenzado a subir de forma que cuando las traineras de la tanda de honor encararon el tercer largo no solo se encontraron con el inconveniente de la corriente en contra, sino también con un viento que rondó los 15 kilómetros por hora.

En ese tercer largo solo Hondarribia aguantó el pulso a Zierbena. La Bou Bizkaia dio muestras de debilidad y junto con Donostiarra cedió terreno de manera definitiva.

Los de Dani Pérez encararon el último largo en cabeza con dos segundos sobre la Ama Guadalupekoa, pero con diez segundos perdidos respecto a Orio y 11 con Cabo da Cruz.

La lógica de lo visto durante toda la jornada indicaba que Zierbena iba a tener que cruzar todo el campo de regateo, lo que otorgaba una cierta ventaja a Hondarribia, mejor situada, pero los galipos decidieron mantener el rumbo por la calle 4 y comenzaron a comerle segundos al cronómetro. A 1.000 metros Cabo tenía ocho segundos de ventaja; a 500 su renta era de cuatro; a menos de 200 el GPS les daba a la par y fue a falta de menos de 100 metros cuando Zierbena se situó como proa de regata entre los gritos de los aficionados locales, que se habían visto celebrando la victoria en casa.

Por detrás, Hondarribia vivió una lucha similar con el crono de Orio, pero 32 centésimas le privaron de la tercera posición y de un punto más. Urdaibai tampoco pudo superar a Kaiku y terminó en sexta posición por delante de Donostiarra. Getaria, última en la segunda tanda, fue décima y cedió la sexta plaza en la clasificación a Cabo da Cruz.

Y por abajo Santurtzi fue novena y le metió tres puntos más a una Samertolameu que hundió en sus aguas las esperanzas que había acumulado en las últimas jornadas. Ocho puntos de desventaja parecen un muro infranqueable, aunque quién se atreve a asegurarlo después de ver lo que hemos visto este fin de semana.