Itziar Eguren, presidenta de Donostia Arraun Lagunak, ha querido rectificar unas declaraciones que realizó a este periódico en las que afirmaba que el domingo «la gente echó de menos lo que parecía que se estaba convirtiendo en una costumbre: hacer el pasillo entre compañeras ... a la trainera ganadora. Este año no hubo nadie».
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«Quiero rectificar lo que dije porque las remeras de Hibaika esperaron y sí que nos hicieron pasillo cuando nuestra trainera salía de la rampa de Getaria», aseguró ayer la mandataria de Donostia Arraun Lagunak, quien con estas palabras quiere «agradecer» el gesto que tuvieron las remeras de la Madalen.
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