Hondarribia, una embarcación acostumbrada a ganar

El paso de Hondarribia por la Liga ETE no sólo ha sido efímero, sino triunfal. Las chicas de Iker Cortés cogieron velocidad de crucero en agosto y desde entonces han sido muy superiores. Han terminado como campeonas y han sido quienes más banderas se han llevado. Empezaron como líderes de la categoría y en el mismo puesto han terminado la temporada. A su ascenso no se le pueden presentar objeciones, desde luego. La próxima temporada volverán a estar con los mejores con total merecimiento.

La plantilla sufrió muchos cambios en invierno, pero entre los fichajes y la cantera han sabido conformar una trainera que deja en el seno del club la sensación de que no es en absoluto inferior a la de años anteriores. El rejuvenecimiento ha sido tal que sólo hay tres remeras de más de 23 años en el plantel que dirige Iker Cortés. La veterana de la cuadrilla es Jasone Mitxelena, de 27 años. Eso lo dice todo.

Pero, las hondarribiarras esperan hacer de esa juventud virtud y, con la ilusión como motor, no renuncian a mejorar ese sexto puesto que lograron en la clasificatoria del jueves. Saldrán sin ninguna presión, con la clara idea de remar a su mejor nivel y con la tranquilidad que otorga el hecho de tener el ascenso en el bosillo después de llenar la mochila de banderas durante el verano.

Hacer una buena regata en La Concha sería redondear una temporada para el recuerdo. Alcanzar la tanda de honor sería un éxito rotundo, aunque para ello deberán mostrar su mejor cara. Contarán con el apoyo de una afición que se desplazará en masa hasta la capital donostiarra y que se entregará a su trainera femenina del mismo modo que lo hará con el bote de Orbañanos. Toda la comarca del Bidasoa les empujará para sacar lo mejor de sí mismas en los dos domingos clave de la temporada. Bogarán en primera tanda junto a Hibaika, Tolosaldea y Cabo.