Borrar
Una madre albanokosobar y su bebé, en un hospital de un campo de refugiados en Kukes (Albania). GERVASIO SÁNCHEZ
¿Entras o sales de la exposición de Gervasio Sánchez?
El Arte de Vivir

¿Entras o sales de la exposición de Gervasio Sánchez?

Las guerras. Hasta que el ser humano cambie de forma individual habrá enfrentamiento y muerte, dicen los sabios. La muestra de fotos en Okendo es un ejemplo

Cristina Turrau

San Sebastián

Sábado, 16 de abril 2022, 16:11

Los que inician una guerra son personas cutres, esquivas y poco interesantes, a no ser que te intrigue la génesis del mal. Nos enseñan más las víctimas. Por eso es interesante visitar la exposición 'Violencias. Mujeres. Guerras'. Son fotos de Gervasio Sánchez, que pueden verse hasta el día 30 de abril en la Casa de Cultura de Okendo, en Donostia. La segunda vez que la visité me paseé sola por las salas. Cuando estaba a punto de irme, entró una mujer. Se asomó a las primeras fotos y se marchó enseguida. Esa mujer bien podía haber sido yo misma.

Me explico. Quedé hace unas semanas con mi amiga Rosa para visitar la exposición. Como llegué pronto entré en la sala, di la vuelta al ruedo y pensé 'Yo ya la he visto. Si se retrasa mi amiga nos vamos directamente a por la cerveza'.

Pero no ocurrió así. Llegó mi acompañante y aunque no dejábamos de hablar -la sala estaba también vacía ese día- empezamos a pararnos en cada una de las imágenes. Y al leer las explicaciones que había añadido a las imágenes el fotógrafo cordobés, la cosa empezó a cambiar. ¿Con cuál de ellas te quedas? Una niña víctima del huracán Micht se peina en un centro de refugiados en Tegucigalpa. Tal fue la destrucción que las guerras civiles que se mantenían en varios países afectados por el desastre tuvieron que parar para rescatar a las víctimas mortales de entre los escombros. Si no fuera por la tragedia parecería la guerra de Gila.

En otra imagen de la exposición, dos niñas palestinas caminan entre soldados israelíes fuertemente armados en la parte antigua de Jerusalén durante la guerra que enfrentó a Estados Unidos contra Irak tras la invasión de Kuwait. Estamos en 1991.

Una niña víctima del huracán Mitch se peina en un centro de damnificados en Honduras. GERVASIO SÁNCHEZ

Ahora es febrero de 2002 y nos encontramos en Afganistán. Una madre bajo su burka y su hija acuden a comprar a un mercado de Kabul semanas después de la caída del régimen talibán. Las mujeres -Gervasio dixit- siguen siendo en este y en otros países el género desaparecido. Ven el ruidoso mundo de los hombres por la rendija del burka.

Nos trasladamos ahora a Aguablanca, un barrio de Cali, en Colombia. Conocemos a Claudia Inés Osorio, que recibió seis disparos en la espalda, por parte de su padrastro, en una discusión familiar cuando tenía 16 años. En la foto, su novio, que le traslada de un sitio a otro, le está ayudando a sentarse en su silla de ruedas instalada en una humilde habitación.

Llega el turno de Noemí Carabali, tan guapa con su vestido blanco. Está en la cama y una enfermera le ayuda en su rehabilitación. Un vecino le disparó cuando ella, de 10 años, se negó a entregarle sus juguetes.

Estamos en Ciudad de Guatemala, es febrero de 1992. Eusebia Arroche es una niña prostituta de 12 años. Le llaman 'La seca'. Gervasio nos cuenta su historia.

En Sierra Leona se nos presenta a la exniña soldado Tity Mbayo, de 13 años.

Y en Irak aparece una doble fotografía de Mawj al Obaidi. En una tiene 9 años. Y en otra, 18. Fue herida en 2003 en un bombardeo estadounidense durante la invasión de Irak. Los detalles de ese ataque nos recuerdan mucho a lo que pasa estos días en Ucrania.

Y están las que más parten el corazón. Las de las madres supervivientes. Es noviembre de 2011 y en la foto aparece Blanca Nuvia Díaz, de 58 años, madre de Irina del Carmen Villero Díaz, de 15 años, secuestrada, violada por una decena de paramilitares y asesinada en Colombia. Su madre ha sido amenazada de muerte. Huyó de su aldea y las amenazas siguieron en la capital solo por pedir que se haga justicia.

En Santiago de Chile aparece retratada la histórica activista Ana González, fallecida en 2018, cuyos dos hijos, su nuera y su marido desaparecieron secuestrados durante la dictadura de Pinochet.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco ¿Entras o sales de la exposición de Gervasio Sánchez?