La maleza se está «comiendo la carretera»

Hoy también tendremos lluvia con temperaturas frescas, pero irá despejando en los próximos días

Asfaltado

Escribe Rosa Rodríguez : «Día 22 de octubre, 01.00 h de la madrugada, momento en el que escribo este mensaje. Están procediendo a asfaltar la calle Tolaregoia, en Egia. Un ruido ensordecedor desde las 22.00 horas. No se puede aguantar. Se llama a la policía municipal y como las obras son del Ayuntamiento me dicen que tienen permiso y que no se puede hacer nada. Esto es una total falta de respeto hacia los ciudadanos. Incomprensible que el asfaltado se realice en horario de descanso, necesario para poder ir a trabajar al día siguiente y por consiguiente cobrar y pagar los impuestos de esta ciudad. Entiendo que el asfaltado de las calles requiere una molestia, pero debe ser asumible por el ciudadano, no puede suponer un perjuicio para el mismo. El fin no justifica los medios».

Perros en la playa

M. T. señala: «Sobre el tema de perros en la playa creo que hay una solución muy fácil y sencilla de aplicar. Parto de dos premisas. Una, el tiempo en otoño en nuestra ciudad es normalmente bueno. Y dos, los perros no pueden ni deben tener más derechos que los ciudadanos por lo que la solución fácil y lógica es que los ciudadanos podamos disfrutar tranquilamente de la playa de mayo a noviembre (sin perros), los meses de buen tiempo, y dejemos a los perros disfrutar de los otros seis meses».

Imprudencia

Comenta Juan Manuel: «Presencié el pasado viernes una imprudencia temeraria en el cruce de Urbieta con San Martín. Un autobús articulado de la línea azul se pasó de la parada de enfrente del antiguo Look, cerrando el paso de peatones que estaba verde para ellos. Una señora trató de cruzar por detrás del autobús mientras el conductor hacía marcha atrás para recuperar la parada perdida y poder enfilar luego la calle San Martín. Estuvo a punto de arrollarla pues no la podía ver. Los gritos de ella y de algunos viandantes frenaron su maniobra imprudente. El conductor decidió entonces parar unos veinte metros más adelante cuando cambió el semáforo de color, dejando libre el paso de peatones y la entrada a San Martín. Esperemos que no se vuelva a producir semejante imprudencia».

Civismo

Expone Amador: «Un día sí y otro también aparecen escritos en el Sirimiri sobre los ciclistas. Aunque sin quitarles la razón no está de más recordar que si hay alguien que no cumple las normas de circulación son en su mayoría los peatones. No hay más que esperar en un semáforo y ver cómo pasan en rojo o que cruzan entre coches o por donde no deben, que van por los carriles bicis y todo esto en muchos casos visto por los agentes de tráfico y sin que les digan nada. No solo jóvenes, también gente bien mayor con problemas de movilidad que se atreven a cruzar por donde no deben. Un punto y aparte son los adultos con niños pequeños, que dando muy mal ejemplo, incumplen las normas de circulación. Por último, decir que todas estas personas que se quejan tanto de los demás espero que ellas sí cumplan con las normas y no se salten jamás un semáforo en rojo».

Pésimo trabajo

Se queja Baltasar de la Hera: «Quiero denunciar el (mal) trabajo realizado por unos instaladores de líneas telefónicas de móvil en la calle Gorgotxo-Matia sobre la pared de la vivienda. Una chapuza que salta a la vista y que resultará irreversible, con cables enmarañados sueltos, caja eléctricas dispersas y una falta de cuidado urbano que da al ojo. El Ayuntamiento y Urbanismo, que concede los permisos y licencias, no tenían que aguantar ni tolerar este tipo de actuaciones y sí exigir hacer corregir ese trabajo».

Charcos

Puri nos envía las siguientes líneas: «Alguien debería arreglar la acera que está frente al restaurante Mamistegi porque cada vez que llueve se forma un charco enorme».