Ya son 22 las mujeres que denuncian haber sufrido abusos del religioso Ezkiaga en el colegio La Salle de Donostia

La primera, Izaskun Iparraguirre, monitora de los campamentos que organizaba el religioso en Isaba (Navarra), relata que habló un hermano de la orden en 1991. La segunda, víctima presuntamente de abusos durante cuatro años, explica que también informó de los hechos en 1995 al colegio, que le aseguró que se ocuparía de ello si bien Ezkiaga fue enviado a Roma unos meses y después volvió. Por su parte, Leire G. confiesa que que envió una carta a la dirección alertando de los abusos y, ese mismo curso, una carta alumna reconoce que se lo dijo a un profesor. «Lo comentamos con uno con quien teníamos confianza y se reía. No nos tenían en cuenta», relata.

El País, que ha hablado con veinte antiguas alumnas y cuatro exalumnos, revela que todas describen a Ezkiaga, director del colegio en en el que estuvo unos 30 años, como un «depredador que cometía abusos impunemente con prácticamente todas las alumnas», desde tocamientos en clase a situaciones más graves en privado con chicas con las que se obsesionaba y a las que acosaba en su despacho, su habitación del colegio o en los campamentos citados previamente en Navarra. No se descarta que haya más víctimas.