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Esta edición de la Semana Grande donostiarra, que se celebra del 10 al 17 de agosto, contará con muchas novedades en su programación festiva. Entre ... todas ellas, aunque obviamente no se incluya en el programa oficial, habría que añadir que al fin todas aquellas personas que acudan al recinto ferial del Paseo Nuevo dejarán de ver cables eléctricos por todas partes.
El clásico cableado aéreo y peatonal de quita y pon que daba servicio a las ferias, estampa que se ha repetido durante décadas en esta zona de la ciudad, pasará a la historia. Y lo hará porque el Ayuntamiento ya ha finalizado la instalación del nuevo centro transformador eléctrico, que está incrustado bajo la cuesta que sube al monte Urgull desde el Paseo Nuevo, que dará servicio a los feriantes que acudan con sus atracciones a la Semana Grande. La electricidad les llegará de forma subterránea a través de las nuevas canalizaciones fijas que conducirán las líneas de baja tensión hasta sus atracciones. Solo falta para finalizar la obra instalar la rejilla de ventilación de este centro de electrificación, una actuación que se llevará a cabo durante esta semana.
A partir de ese momento, solo restará que tanto Iberdrola como el Departamento de Industria del Gobierno Vasco tramiten y legalicen la instalación, con el objetivo de que el transformador se electrifique el 24 de julio y ya pueda comenzar a ser utilizado. «Desde ese día todo el sistema estará ya en tensión», confirma Juantxo Marrero, concejal delegado de Proyectos Urbanos del consistorio.
El gran objetivo de esta actuación es poner fin a la provisionalidad con la que se actuaba cada año al llegar agosto y la Semana Grande y había que ofrecer electricidad a los feriantes que acudían al Paseo Nuevo con sus atracciones. Las imágenes de los postes temporales llenos de cables por los aires serán historia. Desde la Semana Grande de este año los feriantes tendrán a su disposición desde el Aquarium y hasta los antiguos aseos que había en el Paseo Nuevo 15 puntos de toma de electricidad a través de las nuevas canalizaciones subterráneas que también se han instalado.
La infraestructura recién instalada dispone de dos transformadores de 630 KVA cada uno. El habitáculo tiene unas dimensiones de 6,08 metros de largo, 2,38 metros de fondo y 3,05 metros de altura con un margen de 40 centímetros a cada lado. Los muros de hormigón armado de la instalación tienen un grosor de 30 centímetros. La operación de instalación ha supuesto desmontar el muro de mampostería que delimita el parking y su pretil en una longitud de 9 y 10 metros respectivamente, y su recolocación posterior tras la instalación del centro de transformación. Los trabajos han tenido un presupuesto de 295.106 euros (IVA incluido).
La finalización de esta obra ha supuesto que el acceso rodado (para vehículos autorizados) y peatonal al monte Urgull desde el Paseo Nuevo esté abierta por completo.
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