Una vaca se escapa del camión que la llevaba al matadero y convierte el Polígono 27 en la calle Estafeta

«Evacúen el edificio que vamos a disparar a una vaca que se ha escapado del matadero». Con esta orden se han dirigido un par de ertzainas a los trabajadores del edificio Enertic, situado en el paseo Ubarburu del Polígono 27 de San Sebastián. El animal, que ha recorrido toda la zona industrial después de escaparse de un camión que le llevaba al matadero, ha empezado su particular odisea sobre las diez de la mañana y no ha sido abatida hasta dos horas más tarde. La situación se ha solventado con la actuación de dos tiradores de la Ertzaintza, que han descerrejado un total de cinco disparos al animal con un arma larga.

La res, que no quedó claro si se trataba de un ternero o una vaca, rondaba «los 300 kilos» de peso, según calcula Fernando Linares, trabajador de SQA Drones y uno de los evacuados del edificio. Su último paseo comenzó tras fugarse del camión que le transportaba al Matadero Frigorífico Donostiarra (Mafrido), ubicado en el número 16 del citado paseo situado en el polígono de Martutene, unos 300 metros por delante de la gasolinera. Después, el animal que pareció haberse librado de la muerte, caminó ante el asombro de trabajadores y clientes de los diversos talleres y comercios de la calle, arteria principal de la zona industrial. «De repente he escuchado que alguien decía 'para, para, para' y cuando he salido para ver qué pasaba he visto una vaca bastante hermosa», comentaba Débora Pousilla, camarera de la taberna Txomin, situada justo enfrente del que debía ser el último destino del animal. «No nos ha dado tiempo a hacer nada, ni siquiera a grabar. Cuando hemos salido, la vaca estaba justo ahí delante», recalca la hostelera, señalando con la cabeza la puerta del local.

Tras el asombro inicial y la incapacidad de reaccionar, se dio aviso a la Ertzaintza. Habían pasado no más de diez minutos desde que el animal se escapó. Dos horas más tarde, sobre las 12.00, se trasladaron al lugar agentes de la Ertzaintza de Donostia y Hernani, la Guardia Municipal de Astigarraga y la unidad Bizkor de la Ertzaintza para evaluar la situación, controlar la zona y cortar las vías necesarias.

Para ese momento el animal había continuado por el interior de polígono. El operativo policial desplegado la encontró en una zona boscosa de las inmediaciones de la rotonda peraltada, junto al edificio Enertic que tiene allí Fomento de San Sebastián.

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«Ha venido un par de ertzainas sobre las 12.15 a avisarnos piso por piso de que se había metido en la vegetación y que debíamos abandonar el edificio porque el animal se encontraba en la línea de tiro», comenta Linares, que fue uno de los en torno a cien trabajadores que tuvieron que abandonar el inmueble utilizado por varias empresas. Así, la sorpresa del inicio pronto pasó a comentarios jocosos. «Al principio te pegas un susto porque parece algo surrealista. Pero la verdad es que es una buena anécdota que contar, porque parecía que los cien nos íbamos de sanfermines».

Según informan fuentes policiales, la instrucción en este tipo de casos es la de abatir el animal, al tratarse de una vaca de elevado peso que se encuentra sin control en una zona urbana.

«El primer disparo lo hemos escuchado en torno a las 12.25 y, después de unos segundos, hemos escuchado el segundo», explica Linares, que precisa que fueron un total de cinco «en un intervalo de dos minutos y medio» realizado por dos tiradores. Según explicaron los testigos, parecían haberse realizado con «un arma larga», que resultó ser una escopeta. Una actuación que sorprendió a otros trabajadores presentes. «Fueron cinco buenos disparos, ¿no existen dardos tranquilizantes para esto?».

El matadero se hizo cargo del cadáver de la vaca, que disfrutó de dos horas más de vida.