Villa Salia ofrecerá un servicio individualizado e integral a las personas en riesgo de exclusión

En los meses que restan hasta que se pueda abrir el edificio, el consistorio debe equiparlo, cuentan para ello con un presupuesto de 90.000 euros, y sobre todo tiene que sacar a licitación la gestión del servicio del centro de día. La rehabilitación de la villa ha costado 2.642.373 euros y Donostia ha contado con la ayuda de los fondos Next a través de una subvención de 1.394.922 euros.

Villa Salia funcionará en su espacio principal como un recurso de atención diurna (Hestia) que se desarrollará en tres ámbitos. Funcionará como centro de día al que acudirán personas en situación de exclusión para recibir prestaciones del sistema de Servicios Sociales y prestaciones complementarias como consigna, manutención, lavado de ropa y aseo personal. Además, también contará con un equipo de educación en calle, acercándose a las personas en riesgo de exclusión en los lugares que desarrollan su día a día o en los que pernoctan, «con el objetivo principal de acercarlos a los servicios públicos, desde los que se puedan abordar los procesos de inclusión social más complicados», señala Mariaje Idoeta, concejala de Servicios Sociales. Por último, está el trabajo en espacios comunitarios con actividades formativas, deportivas o culturales, en las que puedan participar, preferiblemente en contacto con personas que no estén en la misma situación.

Todo ello, con el objetivo de fomentar un trabajo «integral con cada persona. Creemos que esa es una buena política social ante la exclusión. Dar una comida, por ejemplo, no es hacer una política social. Lo que debemos hacer desde aquí es trabajar en la integridad de las personas, haciendo un trabajo personalizado con cada una de ellas. Es decir, dedicándoles tiempo», señala la edil del PNV. «Y eso se va a hacer en Villa Salia. Se va a orientar a las personas que necesiten prestaciones económicas, a las que precisen realizar tramitaciones como lograr documentos o asesorarles en gestiones básicas. Y, por supuesto, ayudarles en la mediación y la intermediación para mejorar en la relación entre personas».

Las usuarios que accedan a estos servicios solo podrán hacerlo a través de una prescripción técnica del SMUS (Servicio Municipal de Urgencias Sociales).

La apertura de Villa Salia va a conllevar novedades importantes para las personas que acudan al centro de día. Además de una consigna y un espacio para que los usuarios que lleguen con sus perros los puedan dejar a buen recaudo, se mejora el servicio de manutención. Al kit semanal que se entrega con productos de alimentación e higiene para 40 personas, se le añade una comida en el comedor del edificio (que se usará también como sala polivalente) todos los días del año para 24 personas. El almuerzo consistirá en un primer plato, un segundo plato, pan y postre.

También serán novedosos su servicio de lavandería y el servicio de aseo personal con duchas diferenciadas para hombres y mujeres. «Este edificio posibilitará el aseo personal de las personas sin hogar. El servicio contemplará el uso de duchas, jabón, toalla y, en los casos que se establezca, la entrega de ropa interior. Además, seguimos facilitando el acceso a dos duchas semanales en los baños de las cabinas de las playas o en otros baños públicos a 40 personas».

Por último, el centro de día contará con ordenadores con acceso a internet a disposición de las personas usuarias, así como prensa y juegos de mesa.

Villa Salia contará con una organización novedosa para ofrecer sus servicios. Habrá 5 grupos de usuarios semanales (hasta 120 personas distintas) que acudirán al centro 3 días a la semana. «Habrá 24 personas a la mañana, 24 al mediodía y 24 a la tarde. No quiere decir que la misma persona esté en las tres franjas horarias», dice Idoeta. El turno del mediodía, en el que se ofrecen las comidas, estará abierto los 365 días del año. El horario de la mañana será de 9.30 a 12.00, el del mediodía de 12.00 a 14.30 y el de la tarde de 14.30 a 17.00, de lunes a sábado. El domingo solo se abrirá en horario de mediodía.

En cada una de esas franjas, el centro de día atenderá a 24 personas distintas que accederán por prescripción técnica y que podrán hacer uso de las distintas prestaciones a excepción del comedor, que se reserva para las personas que acudan en la franja 2. Además, se permitirá el acceso a otras 6 personas como máximo por cada franja para hacer uso de algún servicio concreto (consigna, aseo personal...). «Se establecerá qué personas podrán hacer uso en cada una de las franjas horarias por prescripción técnica. Este es el punto de partida, pero se será flexible y se podrá ir ajustando el servicio a medida que se vaya valorando el funcionamiento», dice la edil.

Hestia contará con un coordinador general del servicio, de lunes a sábado, tres técnicos y un auxiliar, que serán dos técnicos y un auxiliar los domingos. Además, se incorpora un auxiliar con conocimientos de árabe.