A no permitir sorpresas en Ipurua

Garitano podría apostar por el mismo once que viene jugando en las últimas jornadas, aunque también cabe alguna modificación en ataque dando entrada a Blanco Leschuk en punta y dejando a Bautista en la reserva y opte también por jugar con Aketxe como media punta y baje a Javi Muñoz como pivote acompañando a Sergio Álvarez. Con este movimiento, el hombre sacrificado sería Matheus. El banquillo cuenta con opciones en todas sus líneas. En defensa, a priori, mantendría en bandas a Imanol y Tejero y en el corazón de la zaga a Berrocal y Arbilla. Las bajas son las de Chema Rodríguez, Vadillo, Nolaskoain y Ríos Reina. Troncho, del filial CD Vitoria, estará citado una vez más.

El Eibar en Ipurua es solvente. En esta ocasión se presenta el Albacete, que viene con diecinueve jugadores por las numerosas bajas con las que cuenta. Es un rival que puede testar el potencial de los azulgrana. Lejos de casa los manchegos se muestran fuertes, han logrado diez puntos con tres victorias, un empate y una derrota, exhibiendo su capacidad de sorpresa. El Eibar se va a topar con un Albacete al que hacen pocos goles, muy ordenado y capacidad de sorpresa en salida, con jugadores como Fuster, Riki, entre otros, de habilidad.

La advertencia de Garitano no puede ser más clara cuando dice que hay que ponerse por delante en el marcador dado que es un equipo que juega con marcadores cortos. En sus dos últimas salidas ante Leganés y Alavés ha ganado y empatado respectivamente, dejando constancia de su peligrosidad lejos del Carlos Belmonte. Dos resultados con buenas sensaciones reforzados tras ganar al Oviedo en casa la pasada jornada. En el Albacete milita el exarmero Glauder, afirma que se presentan con la idea de hacerse con los tres puntos. Ganar para el Eibar sería liberador, mantendría su firmeza en Ipurua, contrarrestaría su debilidad como foráneo. En las once jornadas disputadas ha demostrado falta de regularidad, no ha sabido ganar dos partidos consecutivos, no ha encontrado ese equilibrio tan necesario para un candidato a estar arriba.

Vuelve a jornada dominical con un Eibar que contará con el apoyo de su afición. «Se agradece jugar en fin de semana, sea sábado o domingo, sobre todo por la gente, para que puedan venir a Ipurua a gusto y que haya un buen ambiente. Es un partido muy importante para nosotros, necesitamos la ayuda de la gente porque ganar sería un paso vital. Animar a la gente a que nos ayude y que haya una buena comunicación entre equipo y afición, como ha sido hasta ahora», dice Garitano, que sabe del poder de Ipurua.