El Eibar, en busca de los goles perdidos para volver a ganar

El Eibar viaja a Castalia con el deseo y la esperanza de que su renovado ánimo tras el buen partido desplegado en la pasada jornada en casa del Sporting de Gijón le permita acabar con una sequía goleadora que le ha privado de obtener un triunfo en los cuatro últimos partidos.

Y es que desde que Madariaga marcó el tanto que propició el empate ante el Albacete (1-1) hace ahora un mes, los armeros se han extraviado en el camino hacia la portería contraria, y pese a la notable mejoría experimentada en El Molinón, donde jugó prácticamente toda la segunda parte en inferioridad por la expulsión de Álvaro Carrillo, le han dejado a 11 puntos de las plazas de playoff de ascenso y a ocho del descenso, sin más objetivo que tratar de ser lo más competitivo posible para ir dando pasos al frente. «No es momento ni de mirar para arriba ni para abajo. Es momento de mirarnos a nosotros mismos y poder dar la respuesta que dimos el otro día con mucha más frecuencia», dijo ayer Etxeberria.

El central Carrillo, obligado a cumplir una nueva sanción tras la que sufrió por la doble amarilla que vio en Elche hace tres semanas, será la única baja al margen de las consabidas ausencias por lesión de Troncho y Corpas, por lo que una vez más Joseba Etxeberria tampoco podrá repetir la revolucionaria alineación que presentó en Gijón.

Tras los nada menos que siete cambios realizados respecto al anterior partido, tratar de adivinar los planes que maneja el elgoibarrés resulta temerario, aunque, si tanto le gustó lo que vio en el feudo gijonés, parece lógico pensar que podría calcar su once, incluyendo a Cubero en el lateral derecho como novedad.

Eso significa que jugadores como Matheus, Nolaskoain o el propio Antonio Puertas, que estuvo cerca de marcar en el último suspiro ante el Sporting, volverían a quedarse en el banquillo, mientras jóvenes como Madariaga, Guruzeta u Hodei asumen mayores responsabilidades.

También cabe la posibilidad de que éste sea por fin el partido en el que se pueda ver en acción a Arnau Comas, el central que llegó procedente del Basilea el penúltimo día del mercado invernal para ayudar a reforzar la solidez defensiva que logre sellar la portería azulgrana. «Tenemos argumentos ofensivos, pero nos falta eficacia. Cada vez que el equipo se acerca al área contraria genera ocasiones claras, pero nos falta la finalización. Un problema cuya solución reside en insistir, y ahora debemos dar ese plus de confianza a esos jugadores para que la eficacia suba», dijo Etxeberria.

La exigencia será máxima en este sentido, no en vano el Castellón, convertido en rival directo con solo un punto que los azulgranas, maneja registros anotadores más propios de los equipos que comandan la tabla, que los que huyen del descenso. Y eso es precisamente lo que lograron los albinegros tras la flamante victoria lograda en el campo del Racing de Ferrol (1-3), que le ha devuelto la alegría de vivir tras encadenar seis jornadas consecutivas sin perder que le tenían enredado en la zona roja. «Tienen jugadores dentro con mucha movilidad que pueden aparecer muy bajos o pisar el área», advirtió el entrenador del Eibar.

Además de Josep Calavera, que cayó lesionado en A Malata, el entrenador Johan Plat, que el 20 de enero tomó el testigo de su compatriota Dick Schreuder al frente del banquillo, también lamenta la baja de Gio Zarfino, y está a la espera de saber si podrá contar con el defensa uruguayo Juan Escobar, fichado el martes.