Con la vista al frente sin perder la señas de identidad

Impulsado por el ánimo que le ha inyectado el apoteósico final que deparó el histórico gol del meta Magunagoitia que sirvió para rescatar un empate ante el Oviedo (1-1), los armeros quieren hacer méritos suficientes para seguir con la evolución que están evidenciando.

Lo que le importa prima es que la escuadra armera siga emocionando a una afición que ha abrazado con orgullo el nuevo ímpetu que muestra su equipo, y eso es precisamente lo que quiere ver el preparador donostiarra en un estadio histórico que vive momentos agónicos, alejados de las ambiciosas aspiraciones con las que siempre parte el club maño.

Tras empatar en el complicado campo del Mirandilla y merecer más en casa frente al Real Oviedo (1-1), los azulgranas tratarán de enlazar su octavo partido seguido en positivo, no tanto para aspirar a una plazas de playoff que son prácticamente imposibles de alcanzar, sino para seguir ilusionando a los suyos con vistas a asentar las bases de cara al próximo curso, en el que el donostiarra dirigirá de inicio un nuevo proyecto.

Por de pronto, se centra en un duelo de lo más exigente con el aliciente de volver a tener a su disposición tanto a Arbilla y Bautista, limpios de tarjetas una vez cumplida la sanción que les impidió ser de la partida en la pasada jornada, mientras que también podrá alinear de nuevo de inicio a Raúl Comas, recuperado del traumatismo que sufrió en el último entrenamiento previo al choque ante el Cádiz hace tres semanas.

Noticias positivas que contrastan con el hecho de que Guruzeta y Toni Villa, ambos aquejados de un virus gástrico, se sumen a la ausencia del sancionado José Corpas.

Otro protagonista que puede escribir su nombre en la historia del Eibar en el encuentro de La Romareda es Sergio Álvarez. Uno de los capitanes del equipo, con 214 encuentros con la camiseta azulgrana, ha igualado a Ander Capa como el décimo jugador con más partidos en la historia del club. Si Beñat San José lo incluye en el once inicial o le da minutos desde el banquillo ante el Real Zaragoza, superará a Capa y alcanzará a Luis Fernando Rodríguez Astigarraga con 215 partidos. De este modo, ingresará de forma oficial en el top 10 de jugadores con más presencias en la historia reciente de la entidad.

Fundamentos de sobra para motivarse ante un Zaragoza en el que el ex armero Ager Aketxe no ha llegado a triunfar, aunque la llegada de Gabi le ha reportado una nueva ilusión al getxotarra.

Beñat San José está a un solo partido de superar el mejor arranque de un entrenador al frente del banquillo armero. Con tres victorias y cuatro empates desde su debut, ha igualado la marca del también donostiarra Antonio Corral Artayer, quien dirigió al Eibar entre 1953 y 1958 y logró esa misma racha de siete partidos. Sin embargo, el escenario no es sencillo. «Es una salida muy difícil a un estadio histórico ante un clásico del fútbol que ahora le ha tocado estar abajo, pero que con su nuevo entrenador tienen una energía renovada», explicó San José.

Además, habló del buen momento del equipo. «Lo que me encanta del Eibar es que si su afición se identifica con el equipo, disfruta, más allá de la posición en la que esté», comentó. Dejando en claro que la buena racha del equipo armero, además de por los jugadores, es por la grada.