El Supremo rebaja de 11 a 2 años de prisión la pena al profesor de Gaztelueta por abusos sexuales a un alumno

El Tribunal Supremo ha reducido de 11 a 2 años la pena impuesta en noviembre de 2018 a José María Martínez Sanz, numerario del Opus Dei y durante 8 años profesor del colegio Gaztelueta, por abusos sexuales continuados a uno de sus alumnos durante los cursos 2008-2009 y 2009-2010, cuando compartieron aula y sesiones de tutoría. La Sala ha aceptado parcialmente el recurso del profesor, que demandaba haber visto vulnerado su derecho a la presunción de inocencia, y considera hechos no probados dos de los cinco argumentos que elevaron la pena hasta los 11 años

El fallo emitido hace casi dos años por la Sección Primera de la Audiencia Nacional sorprendió a todas las partes por la elevada cuantía de la pena, que casi cuadriplicaba lo pedido por la Fiscalía e incluso superaba lo solicitado por la familia de la víctima. El fallo prohibía también al exprofesor acercarse a la víctima, Juan C., durante 15 años, le inhabilitaba de forma absoluta durante 11 y le condenaba a pagar las costas.

Los once años era la mayor condena por abusos sexuales contra una persona relacionada con la Iglesia en Euskadi. En la vista oral, tanto los abogados como los peritos confesaron que este caso era el más complicado al que se habían enfrentado. Se trataba de la versión de la víctima contra la del acusado. Sin testigos. Sin evidencias físicas. ¿Es la declaración de la víctima una prueba de cargo apta para «enervar la presunción de inocencia» del profesor?, se cuestiona el tribunal en la sentencia. Y su respuesta fue concluyente: sí, sin ningún género de dudas. Sin embargo, el Supremo excluye como hechos probados aquellos testimonios de los que no constaban pruebas.