El polvo procedente del desierto del Sahara deteriora la calidad del aire en Euskadi

No es la primera vez que este fenómeno llega hasta Gipuzkoa. Se produce periódicamente, cuando el polvo del Sahara se levanta hasta la atmósfera y las corrientes de viento provocan que viaje por el aire. «En esta ocasión ha llegado a Europa, pero hay veces que cruza el Atlántico y llega hasta Brasil, a la selva amazónica», afirma Josu Benaito, director de Medio Ambiente del Ayuntamiento de San Sebastián, que recomienda a los ciudadanos que en los próximos días actúen con «prudencia» y que sigan las recomendaciones de las autoridades hasta que se limpie el aire.

Las estaciones meteorológicas que miden la calidad del aire en diferentes municipios de Euskadi arrojaron ayer valores muy por encima de lo recomendable, «aunque no preocupantes», añade Benaito. Así, la de Easo, en Donostia, alcanzó ayer los 90 microgramos por metro cúbico en concentración de partículas PM10, cuando lo recomendado por la UE es que se sitúe por debajo de 50. Este valor mide partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, metálicas, cemento o polen dispersas en la atmósfera. En Tolosa se alcanzaron los 86 y en Beasain los 76.

Benaito explica que son «partículas muy finas que tienen facilidad para entrar en las vías respiratorias», por ello es importante que las personas con afecciones respiratorias o enfermedades crónicas tengan especial cuidado, ya que puede afectar a su salud. El Ayuntamiento de Donostia recomienda a este colectivo, así como a los niños y a aquellos que realizan deporte físico intenso al aire libre, que no realicen grandes esfuerzos físicos en el exterior. Asimismo, se recomienda evitar el uso del vehículo privado, «ya que los vehículos son una fuente de partículas que contribuyen a incrementar los niveles».

No obstante, la previsión es que la calidad del aire comience a mejorar desde hoy, ya que se espera la llegada de precipitaciones, lo que limpiará el aire de la atmósfera. El viento dejará además de soplar de componente Sur, que es el que atrae el polvo del Sáhara hacia el norte de la península, y bajarán las temperaturas. Se espera que mañana el fenómeno haya desaparecido.