Cenando con Pablo se enciende por el precio de una botella de agua en un restaurante: «¿Por qué me cobras esto?»

El restaurante Abac de Barcelona no defraudó a 'Cenando con Pablo'. Y es que Pablo Cabezali quiso disfrutar en primera persona de la elaborada carta que ofrece el restaurante de Jordi Cruz, un tres Estrellas Michelin situado en Barcelona. Eso sí, más allá de platos tan sabrosos como los fideos de brioche a modo de ramen Thai con carabineros o el brioche de anguila a la brasa con alioli de citronela, hubo un aspecto que escoció especialmente al influencer. Y no precisamente la generosa cuenta final de 301 euros… Se trataba de un importe menor: el de la botella de agua. «¿Por qué me cobras seis euros? Me sienta mal, pero lamentablemente parece ser el estándar en los restaurantes Estrellas Michelin», afirmó.

El influencer Pablo Cabezali tomó la decisión de volver al Abac de Barcelona, restaurante que ya había visitado tres años antes… con una cuenta mucho más accesible: 70 euros. En esta ocasión el influencer no perdió la ocasión de disfrutar de algunos de los platos más selectos que ofrece el local de Jordi Cruz, que ejerce de jurado de Masterchef en el conocido programa de televisión. Lo hizo, eso sí, con suerte desigual, y eso que a su llegada el chef le advirtió de la experiencia gastronómica que le esperaba. «Hay platos pensados para gustar muchos y otros que son una rareza y que están pensados para ser curiosos», explicó.

Y así fue, 'Cenando con Pablo' disfrutó de lo lindo de platos como el brioche de anguila a la brasa con alioli de citronela o los fideos de brioche a modo de ramen Thai con carabineros. Sin embargo, en los 19 pases de los que constaba el menú también hubo opciones menos sugerentes y escasamente atractivas. El más llamativo, el Wellington con hojaldre de arroz, cecina de león y setas de Asia. Con él, el influencer no se anduvo con rodeos: «No me dice nada», criticó.

Pese a todo, el influencer acabó más que satisfecho por la propuesta del restaurante Abac de Barcelona, uno de los más caros de toda España. «No es perfecto. Le pongo algún 'pero', pero me ha gustado. Mola volver a algunos sitios y me lo he pasado muy bien», reconoció con su habitual naturalidad y sinceridad.

Eso sí, lo que no le gustó tanto fue la sorpresa que se encontró en la cuenta final. Y no precisamente por el importe total, que fue de 301 euros. Y todo por una razón menor pero que llamó la atención del influencer especialmente: el excesivo precio de la botella de agua. «Jordi, ¿por qué me cobras seis euros por el agua? Me sienta mal, pero lamentablemente parece ser el estándar en los restaurantes Estrellas Michelin», reconoció 'Cenando con Pablo', resignado.