«Estamos en el momento más delicado de la pandemia. Corremos el peligro de que aparezca una mutación de la variante india, es el momento ideal». El virólogo José Alcamí, jefe de la unidad de Inmunopatología del Sida del Instituto de Salud Carlos III y ... coautor del libro 'Coronavirus', es uno de los científicos españoles con mayor prestigio internacional y que más ha estudiado el microbio que nació en Wuhan. En esta entrevista, analiza el impacto de las cepas en circulación y el momento actual de la epidemia. «Hay que vacunar lo más rápido que sea posible», ruega a las instituciones sanitarias.
- ¿Cada vez circulan más variantes o es solo una impresión?
- Hay más variantes y es normal que esto suceda. Pero si lo vemos con un poco de perspectiva, esas variantes aparecen y desaparecen, unas van sustituyendo a otras. Ahora mismo estamos asistiendo a ese fenómeno: la variante delta o india está reemplazando a la alfa o inglesa. Mi impresión es que el virus está alcanzando su techo de capacidad de propagación. Ha generado sus versiones 2.0, 3.0 y ya va por la 4.0, que sería la variante delta. No sé si le quedan muchas posibilidades de mejora.
José Alcamí | Virólogo del Instituto de Salud Carlos III
- ¡Qué buena noticia!
- Es posible que en un momento determinado una variante sea la óptima, la que mejor puede generar el virus para transmitirse y la epidemia se detenga ahí. Pero hemos de estar muy atentos. Este virus nos ha sorprendido por su alta capacidad de adaptación y de generar variantes cada vez más infectivas. Es algo espectacular. La gente que lo ha calculado estima que se transmite cinco veces mejor que la original de Wuhan.
- Pero por muy hábil que sea, en algún momento parará, ¿no?
- Si este virus se distingue por algo es por su capacidad de adaptación. Independientemente de su agresividad, hay tres mecanismos de generar variantes víricas: las que infectan mejor, las que resisten mejor la respuesta inmune y las que llamamos variantes de escape. En los tres puntos hemos llegado al techo, aunque quizás la delta tenga capacidad de mejora y sea capaz de generar una nueva forma 'delta plus'.
«Los expertos estiman que la delta contagia cinco veces más que la cepa original de Wuhan»
- ¿A qué se refiere?
- Ahora que la mitad de la población está vacunada existe el riesgo de que aparezcan una mutación con cierta resistencia a las vacunas. Estamos sometiendo al virus a mucha presión y él va a intentar sobrevivir y encontrar vías de escape, carreteras alternativas. Hasta que no esté vacunada el 80% o 90% de la población, corremos el riesgo de tener algún susto.
- Luego volvemos sobre este asunto. Dígame, ¿por qué se produce tanta variante?
- Es su biología. Dentro de los virus de tipo ARN, los coronavirus son los que menos variantes generan. Siempre hemos transmitido ese mensaje, pero éste debe ser el tonto de la clase. ¿Cuál es su destino final? Quizás ser controlado por las vacunas y pasar a convertirse en un virus catarral más, pero eso es algo muy difícil de predecir en este momento.
- ¿Cada variante es siempre peor que la anterior?
- Desgraciadamente, sí, porque es capaz de transmitirse mejor, a más personas y tiene un cierto grado de resistencia a la vacuna. Nos han vacunado con la famosa proteína 'spike' (espícula) de la forma original de Wuhan, pero desde aquella a la actual ya se han dado de 12 a 20 mutaciones. ¿Ya no funciona? Afortunadamente, no es así. Al principio, la vacuna plantaba al virus un muro de ocho metros, pero aún es de cinco.
- ¿Qué podemos esperar de la cepa peruana, nada bueno?
- Sabemos que se transmite mejor y tiene alguna mutación que en otras se ha asociado a resistencia a los anticuerpos. En el sentido evolutivo, parece una prima hermana de la india. Hay que vigilarla, carecemos aún de datos.
«La inmunidad de grupo ya no se alcanzará hasta que se vacune a más del 80% de la población»
Vacunar «más y cuanto antes»
- ¿Existe el riesgo de que las vacunas dejen de servirnos?
- Ese riesgo siempre existe, pero los datos que tenemos son buenos. Reino Unido, que se ha convertido en un gran laboratorio, donde se han puesto millones de vacunas de todo tipo, ha demostrado que una sola dosis no protege bien frente a la variante delta. Confiere una protección del 30%. Con dos dosis, estamos viendo que las vacunas funcionan frente a todas las variantes, salvo Astrazeneca y Novavax, que no responden bien con la cepa sudafricana.
- ¿Estamos llegando tarde para inmunizar a la juventud?
- ¡Es que hemos ido muy deprisa! El desafío es proteger a 7.000 millones de personas en dos o tres años. Estamos ante un reto al que la Humanidad nunca antes se había enfrentado. La estrategia de vacunación, con sus críticas, que pueden hacerse, ha sido buena, comenzando por los más frágiles. Hemos ido a toda la velocidad posible, pero ahora, como ya advertimos hace meses (EL CORREO, 14 abril 2021), nos encontramos ante el momento más crítico del proceso con el 50% de la población inmunizada.
- Explíquese, por favor.
- Habíamos previsto que el verano sería el momento más crítico, con un 50% de la población vacunada y otro 50% que no lo está. Éste es el momento más delicado, porque si el virus estuviera contenido, como hace un mes, estaríamos tranquilos para afrontar un tiempo de muchos contactos. Pero está desatado, con transmisión comunitaria; es justo ahora cuando pueden surgir nuevas variantes de la india; y el sistema sanitario está comenzando a sufrir.
- ¿La vacunación de los chavales ha comenzado tarde?
- Lo más práctico hubiera sido pincharles una dosis en septiembre, según aparecieran por la puerta de clase. Ahora ya, si tenemos dosis suficientes, lo mejor es vacunar más y cuanto antes, porque son los grandes vectores de la actual transmisión.
«Este no es un virus que se cronifique, pero los jóvenes tienen más riesgo de síndrome postcovid»
CONSECUENCIAS DE ESTA OLA
Lejos de la inmunidad colectiva
- ¿Qué consecuencias puede tener esta propagación tan rápida de la variante delta?
- La primera, muchísima gente infectada. Ya estamos viendo cómo los hospitales abren nuevas salas y suspenden cirugías. Desde el punto de vista de un virólogo, lo que me preocupa es que surja dentro de esta variante una mutación que le dé una resistencia a la anticuerpos y anule la respuesta inmune de la vacunas. Eso es lo que podría pasar y hay que vigilarlo mejor de lo que se está haciendo. Hay que secuenciar mucho más todos los casos que se diagnostican para ver exactamente qué está pasando, porque el virus no va a quedarse quieto. Si puede replicarse, estará generando pequeños cambios y alguno de ellos puede ser un gran cambio de comportamiento y darnos un susto.
- ¿A qué efectos secundarios pueden enfrentarse los jóvenes infectados con estas nuevas formas de coronavirus?
- No los tenemos bien definidos, pero parece que este covid crónico o síndrome postcovid podrá afectarles en mayor medida. Se manifiesta con cansancio, cefaleas crónicas, dificultad de concentración, pérdida de memoria... Es como un cuadro gripal que se prolonga en el tiempo.
- ¿Puede ocurrir como sucedió con el virus de la hepatitis C, que pasados 15 ó 20 años se vio que era algo muy grave?
- No, en absoluto. Este no es un virus que se cronifique, como el de la hepatitis C. Se trata de una infección aguda. En algunas personas puede haber cierta persistencia de los síntomas, sobre todo en el aparato digestivo, porque también infecta sus células y un síntoma es la diarrea. Son pocos los virus que se cronifican.
- ¿Por qué insiste tanto en vacunar al 80% de la población o más si siempre se habló de un 70%?
-La inmunidad de grupo depende de la capacidad de transmisión del germen. La barrera que has de poner depende de su propagación. No es lo mismo la gripe que el sarampión. El Covid 19 se transmite cada vez más. El objetivo del 70% valía para la forma original de Wuhan, pero no para ésta.
Las 5 variantes que más han golpeado o amenazan
Comenzó en Lleida y se extendió por la UE. Surgió el verano pasado, cuando Europa salía del confinamiento que creía haberla salvado. Fue detectada en unos temporeros en Lleida y su «extraordinaria capacidad de propagación» la convirtió pronto en la forma dominante en la UE. Aún está en circulación.
No tan letal como se creyó al principio. Reino Unido la documentó en septiembre de 2020. En enero ya estaba en España y para abril era la forma predominante. Su mayor capacidad de contagio favoreció su propagación, pero no resultó ser tan letal como se creyó al principio.
La auténtica amenaza contra las vacunas. La variante que más preocupa a los servicios de salud, porque ésta sí podría anular la validez de las actuales vacunas. Algunas (Astrazeneca y Novavax) ya se han mostrado ineficaces ante ella y otras ofrecen resultados irregulares. Su presencia en España es menor.
Altamente contagiosa, pero tampoco tan letal. La forma de coronavirus que «más corre», la que se propaga con mayor rapidez y la que está poniendo en jaque al sistema hoy en toda España. Un 60% mas transmisible que la alfa, aunque tampoco tan letal como se creyó. La OMS habla de una 'delta plus' más dañina.
Una amenaza de la que aún se ignora mucho. Representa sólo el 11% de las muestras de virus analizadas. Se cree que podría ser tan transmisible como la india, pero que escaparía al efecto de las vacunas. No se sabe. Existen otras variantes (californiana, brasileña...) que serían peligrosas. Está por confirmarse.