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RAQUEL RODRÍGUEZ
Miércoles, 26 de junio 2019, 07:22
¿Quién nos iba a decir que los tan mal vistos cotilleos iban a tener algún beneficio para nuestra salud? Pues sí, un estudio publicado en el Social Psyhoclogica and Personality Science Jorunal lo confirma, así que no te sientas mal por chismear porque ... tiene su punto positivo.
El estudio en el que participaron más de 100 personas diferentes y que duró dos años concluye diciendo que compartir cotilleos con otras personas nos ayuda a formar alianzas sociales valiosas. Y es que, ser cotilla ayuda a entablar relaciones sociales, favorece la paz mental y la interacción social e incluso puede ayudarnos a lidiar con los problemas que se presenten en el futuro.
Eso sí, el estudio apunta que estos beneficios se notan cuando los chismes se cuentan en tono neutral o positivo y no con maldad. Es más, hablar mal de otras personas con intenciones dañinas y despectivas pueden tener efectos totalmente contrarios en nuestra salud. La negatividad y la envidia no favorecen nada a nuestro estado de ánimo.
Los chismes son parte de la vida, hablar de lo que nos rodea y compartir lo que vemos es inevitable y algo totalmente normal. Lo único que hay que hacer es intentar poner buena intención a la hora de compartirlos.
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