Wegovy ya está en las farmacias de Gipuzkoa

Al igual que su homólogo Ozempic, Wegoby es un medicamento análogo de la GLP-1 que mejora los niveles de glucosa en sangre y ayuda a bajar de peso. Ambos comparten principio activo, la semaglutida, que reproduce de forma sintética a una hormona natural que actúa sobre los centros del apetito en el cerebro y en el intestino, produciendo sensación de saciedad. «Ensayos clínicos muestran que semaglutida reduce la ingesta calórica, aumenta la sensación de saciedad, plenitud y el control de la ingesta, reduce la sensación de hambre, y la frecuencia y la intensidad del ansia de comer. Además, la semaglutida reduce la preferencia por alimentos con alto contenido en grasa», explica la ficha técnica del propio fármaco que detalla, eso sí, que la indicación control de peso «es siempre en combinación con una nutrición saludable y un aumento de la actividad física».

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios recuerda que estos medicamentos deben ser siempre dispensados con receta médica por un facultativo y, debido al éxito de ventas que tuvo Ozempic –los beneficios de la farmacéutica se han disparado un 30% en el primer trimestre del año–, subraya la importancia de prescribirlo solo a los pacientes que más la necesitan. «La AEMPS recuerda la necesidad de ajustar las prescripciones para priorizar el uso de estos tratamientos para el control glucémico de pacientes con DM2 ya que las alternativas terapéuticas para ellos pueden ser más complejas», explica la agencia.

Wegovy se debe inyectar por vía subcutánea en el abdomen, el muslo o la parte superior del brazo, una vez a la semana a cualquier hora del día, con o sin alimentos. De momento no está sufragado por el Sistema Nacional de Salud y su precio oscila entre los 180 y los casi 300 euros, dependiendo de la dosis.