La super piparra de Ibarra que resiste a los virus gracias a la mutación genética

En los últimos años, diferentes variedades locales de pimientos que se cultivan en Euskadi como el pimiento de Gernika o la piparra de Ibarra han sido víctimas de diferentes virus que han provocado pérdidas importantes en su cosecha y preocupación en el sector agrícola vasco. Una situación que desde 2014 algunas productoras comenzaron a alertar, inquietas por los problemas derivados de estos virus en sus cultivos.

Así fue como surgió un programa de investigación realizado por el centro tecnológico NEIKER, entidad dependiente del Departamento de Alimentación, Desarrollo Rural y Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco, que buscaba soluciones eficaces para combatir las enfermedades causadas especialmente por el virus del género Tobamorivus y que recientemente ha sido premiado como una de las mejores investigaciones de ciencia y tecnología en euskera en los galardones CAF-Elhuyar.

En concreto, el reconimiento ha recaído en Mikel Ojinaga por su trabajo titulado «Birus aurkako 'Gudari irribarretsua'» («El 'guerrero sonriente' contra los virus») que analizaba la resistencia de los principales tipos de pimientos cultivados en Euskadi frente a diversas enfermedades.

En su estudio, el investigador certificaba que algunos pimientos cultivados en Euskadi como el pimiento de Gernika o la piparra de Ibarra están adaptados a las condiciones agroclimáticas locales pero que son vulnerables a la aparición de virus, sobre todo aquellos más novedosos. A lo largo de siete años, Ojinaga y su programa desarrollaron mejoras genéticas que lograron insertar en los pimientos para «proporcionar a los productores locales herramientas efectivas para combatir los virus y, al mismo tiempo, fortalecer la competitividad de sus cultivos».

Un avance agrocientífico que ha conseguido abortar una problemática crucial que afecta a dos de los cultivos que más se trabajan en Euskadi, «tanto por su valor económico como por su arraigo en la tradición agrícola local» y por el que Mikel Ojinaga ha sido reconocido con el premio especial NEIKER en los galardones CAF-Elhuyar, correspondido con 2.000 euros y una escultura del artista Imanol Andonegi Mendizabal.

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