Ion Izagirre: «Recibir premios es síntoma de que todo va bien»

Si hay un deporte que ha brillado con luz propia este año, ese ha sido el ciclismo. El regreso del Tour de Francia a nuestras carreteras más de 30 años después se ha convertido en uno de los momentos de 2023. Tanto para la afición vasca como para los propios ciclistas, que pudieron sentir de cerca, como protagonistas, la pasión que se vive por este deporte en Euskadi.

Uno de esos corredores que pedaleó por las carreteras guipuzcoanas en verano (a lo que hay que sumar la etapa inicial en Bilbao) es Ion Izagirre. El de Ormaiztegi ha recibido el Premio Gipuzkoa Kirolak Masculino: «Recibir premios es síntoma de que todo va bien». El ciclista ha completado un gran año, destacando la victoria de etapa en el Tour de Francia, en la jornada con final en Belleville-en-Beaujolais.

El guipuzcoano reconoce que lo vivido durante aquellos días de julio fue «intenso», pero «bonito por la cultura que tenemos, la afición respondió muy bien. Estuvo animando a todos los corredores». Al guipuzcoano le hizo especial ilusión porque «el pelotón internacional recorrió las carreteras en las que he entrenado toda mi vida». Un evento que confía que sirva «para las nuevas generaciones, para que se ilusionen después de ver a sus ídolos».

Respecto a su victoria de etapa en la ronda francesa, subraya que «fue el día 'D'». Levantó los brazos después de ser el más fuerte en una escapada de mucho nivel en el que soltó, entre otros muchos, al actual campeón del mundo, Mathieu Van der Poel: «Sabía que tenía que soltarles ahí, no había mucho más terreno». Además, «creo que era mejor ir en solitario que con varios arrancando y parando».

Este año también ha logrado la victoria en el Gran Premio Miguel Indurain, además de otros puestos meritorios como su quinta plaza en la Clásica San Sebastián o el tercer puesto en la general de la Itzulia. «En casa me motivo mucho, me da un plus», especialmente una Itzulia que «la preparo mucho» y lleva años peleando por el podio.

Con el año cerca de llegar a su fin (la temporada lo hizo hace semanas), Ion Izagirre piensa ya en lo que está por venir, que no es poco. 2024 se presenta como un año muy atractivo para el de Ormaiztegi, que tiene los objetivos muy claros: «Será más o menos la misma planificación de este año: empezaré en la Challenge de Mallorca, estaré en carreras de una semana como París-Niza o Itzulia, el tríptico de las Ardenas y el Tour».